Probablemente cada uno de nosotros ha visto fotos de bebés. Por supuesto, antes, para que apareciera toda la familia en una foto, se contrataba a un fotógrafo, y cuando todo estaba listo, se hacía clic… También se esperaba a que el bebé estuviera más fortalecido.
Antaño, existían muchas supersticiones sobre fotografiar a los niños. Se consideraba incorrecto tomar fotos de bebés durmiendo, o si aún no habían pasado el rito del bautismo.
Ahora todo está patas arriba. El hecho en cuestión es que, en la mayoría de los países de Europa y América, capturar el momento del nacimiento se ha convertido en un ritual muy popular. Los futuros padres, incluso, contratan a fotógrafos privados, para que se presenten durante los partos en casa. Y todo para tener un recuerdo único, de buena calidad, para después poder subir a la red.
También es reconfortante poder filmar el proceso del parto con una buena cámara. Así ocurrió en una clínica de fertilidad de Venezuela. Durante la cesárea, uno de los paramédicos decidió grabar un video en el teléfono. ¡Sólo mira lo que le pasó!
https://www.youtube.com/watch?v=SReyLjalNjg
Este conmovedor video fue subido a la web, vía Instagram. A los pocos días ya ha sido visto por cientos de miles de personas, causando verdadera sensación en la red, aunque muchos moralistas no se cansan de repetir que el proceso del parto (cualesquiera que sea) debe permanece en la intimidad, no ser llevado a la luz pública.