Todo comenzó cuando a la abuela de Scout le diagnosticaron cáncer de mama. Queríamos tener la mente ocupada durante esos momentos duros. Cuando se le empezó a caer el pelo a la abuela Scout se preocupó mucho, y quise enseñarle y recordarme a mi misma que las mujeres somos luchadoras. Así que elegimos a mujeres fuertes y famosas.
Hicimos una lista y le enseñé a Scout cosas sobre cada una. Luego elegimos juntas la foto que queríamos replicar y lo llevamos a cabo durante algo menos de 1 año. Scout aprendió lo fuertes que son las mujeres y esperábamos al final hacer un álbum de fotos para Scout y la abuela. Cuando vio el resultado fue increíble, todo valió la pena.
Espero que Scout pueda un día recordar esto siendo lo bastante mayor para entender lo que representaba y esté orgullosa de quién es. La he animado a ser la persona que quiera ser.
¿Y la abuela? ¡Ya no tiene cáncer! Así que por supuesto, tenía que estar en las fotos. Es una inspiración y tenemos suerte de que esté en nuestras vidas. ¡Nuestra heroína!