¿Una víctima o culpable de los estereotipos femeninos? Da igual si es una o la otra, la verdad es que la muñeca Barbie es icono de los arquetipos de belleza y comportamiento.
La artista Annelies Hofmeyr, quien es oriunda de Sudáfrica y vive en Canadá, presintió que la muñeca de Mattel no se sentía tan cómoda con este papel de “perfección” y se empeñó en crear una imagen más “real” de la muñeca, mostrando y realizando cosas que escapan de los moldes impuestos, en la cuenta de Instagram “Trophy Wife Barbie” (Barbie esposa trofeo).
“El objetivo principal es marcar los límites de las etiquetas y explorar las cuestiones de género y la identidad de la mujer moderna. Este trabajo es una invitación a considerar lo que podría suceder si nos centramos en las cosas que tenemos en común, en lugar de temer las cosas que nos hacen diferentes”, cuenta la autora en su sitio web.
Según cuenta este personaje en su primera publicación hace un año y medio, todo comenzó cuando se divorció de Ken… y le cortó la cabeza.
En el resto de las fotografías retocadas digitalmente, Barbie luce enormes cuernos que “representan la etiqueta de la mujer como un trofeo de caza (algo pensado para ser propiedad de alguien)”, en forma de parodia.