¿Alguna vez has ido a una prisión?
Es un lugar sumamente deprimente, toda esperanza, alegría y vida se extingue cuando cruzas esos muros y rejas… En mi caso, he visitado una prisión de mi ciudad como parte de un proyecto universitario y debo decir que la experiencia no es para nada grata.
No mentiré, siempre tuve curiosidad por conocer un establecimiento como estos, puesto que una cosa es lo que ves en pantalla (a través de las películas y series) y otra es la realidad… y debo decir que la realidad es mucho peor.
Recientemente, un fotógrafo ha hecho noticia al publicar fotografías de una prisión de sólo mujeres ubicada en Israel, las imágenes son bastante cercanas y nos permiten entrever lo duro que es la vida para estas mujeres que están privadas de su libertad.
Echa un vistazo:
¡Conoce a Tomer Ifrah!
Un fotógrafo de 36 años, nacido en Israel, que comenzó a fotografiar historias documentales en el 2007, después de un viaje a Etiopía y desde entonces se ha comprometido enteramente a la fotografía documental.
Ha ganado varios premios por su trabajo documental en Israel.
Tomer es principalmente conocido por abordar temas sociales y fotografiar historias de la vida cotidiana, lo que permite al espectador tener una visión íntima de lo que sucede en otras partes del mundo.
¡Este fotógrafo hizo noticia!
Al publicar una serie de fotografías de mujeres en una prisión femenina de Israel, las imágenes fueron presentadas a través del Daily Mail, quién entrevistó al fotógrafo.
La prisión alberga a más de 25.000 mujeres.
Entre las edades de 18 y 70 años, de acuerdo con el israelí, la mayoría de las prisioneras están ese lugar por segunda o tercera vez.
El fotógrafo cuenta que su propósito principal era:
Tomar imágenes de una sola prisionera, pero después de hablar con otras, decidió pedir permiso a las autoridades de la prisión para volver más adelante y fotografiar a otras mujeres.
Durante 3 meses, Tomer pasó un día a la semana…
Para comprender la vida de estas mujeres: “Las prisioneras tienen distintos antecedentes sociales, la mayoría pertenece a minorías sin poder. Comparten sus vidas en este espacio pequeñísimo. La mayoría de las mujeres en la prisión Nerve Triza ya van en su segundo o tercer ciclo acá, están atrapadas en un círculo vicioso”, explica el fotógrafo.
Las imágenes muestran los reducidos que son los espacios.
Donde viven las prisioneras, el cual comparten con otras decenas de mujeres.
En 1979 ¡Una exprisionera testificó!
Frente las Naciones Unidas y aseguró que la prisión está sobrepoblada, es más, según sus declaraciones, podían llegar a haber 150 detenidas en una sola celda y algunas con sus hijos en brazos.
El fotógrafo cuenta que las mujeres que están encerradas ahí…
No sólo pierden su libertad, sino que se ven privadas de cualquier clase de expresión, tanto así, que les confiscan cualquier objeto que puedan usar para escribir.
Igualmente menciona la gran tensión entre las prisioneras.
Sobre todo musulmanas y judías… De acuerdo a Tomer, muchas de ellas ni deberían estar ahí, sino en hospitales psiquiátricos. Y una gran parte de esas mujeres ni siquiera son de Israel, sino de otros lugares como Etiopía, Rusia y Sudamérica.
Por otro lado, en el 2014:
Se llevó a cabo un proyecto de rehabilitación en dicho recinto, el cual consistió en un desfile de moda, todo con el fin de ayudar a la autoestima de las prisioneras que llevaban mucho tiempo allí.
Las fotografías de Ifrah deja en evidencia la crueldad.
Que existe en Nerve Triza… Esperemos que la situación de sobre-población pueda llegar a solventarse, ya que, aunque estas mujeres hayan cometido algún delito, siguen siendo seres humanos.