El imperio romano fue una gran civilización que lucho en incontables guerras. Todo esto lo hemos escuchado en la escuela, pero lo que no hemos escuchado son sus costumbres realmente asquerosas.
Estas son solo algunas de ellas que realmente no creo que nadie se animaría a hacer hoy en día.
1. Se enjuagaban la boca con orina: La orina era el producto que les blanqueaba los dientes de la mejor manera o eso decían. Existían comerciantes que solo vivían vendiendo orina para este uso.
2. Todos usaban la misma esponja: Es sabido que en la antigua Roma existían baños públicos donde cualquiera podía ir a hacer sus necesidades y que estos eran demasiado repugnantes. No se limpiaban casi nunca y estaban llenos de parásitos. La peor parte es que en un baño solo existía una esponja atada a un palo para limpiarse luego de defecar, esta esponja era usada por todos y apenas se mojaba antes.
3. Sus baños explotaban: Los baños públicos de Roma no destacaron solo por su asquerosidad, también por tener un ingenioso sistema de alcantarillado que fue la base para los que hoy en día conocemos. En aquella época solía haber mucha acumulación de metano en este alcantarillado lo cuál ocasionaba que explotarán. Hay registros que hablan de personas muertas por lo que podríamos llamar “explosión de caca”.
4. Tomaban sangre: La sangre era usaba como medicamento que curaba distintas enfermedades. Para obtenerla la extraían de los cadáveres de gladiadores, pero al prohibirse esta práctica se empezó a extraer de los prisioneros condenados a muerte. Se tomaba como cualquier jarabe de hoy en día.
5. Usaban la piel muerta de los gladiadores: La piel de los gladiadores se usaba como afrodisíaco. Las mujeres compraban la piel muerte que se quitaban los gladiadores durante el aseo para ser más atractivas. Se convertía esta piel muerta en crema que ellas usarían con este fin de belleza.
6. Vomitaban en los festines: Durante los grandes festines romanos había la costumbre de vomitar para seguir comiendo. Una vez estabas llenos tenías que vomitar para no parar de comer hasta que la comida acabará.
7. El ejército mostraban sus nalgas al enemigo: El ejército romano tenía la costumbre de mostrar sus nalgas al enemigo antes de la batalla. Era la manera que tenían de burlarse y si podían tirarse flatulencias era mucho mejor la burla.
8. Tomaban heces de cabra: Hacían bebidas energéticas con las heces de la cabra. Lo que hacían era hervirla en vinagre para luego agregar a cualquier bebida que ellos quisieran, esto dicen que devolvía la fuerza a cualquiera que este cansado.