Amy Lee fue una de las estrellas de la música de mayor éxito mundial a principios del 2000, con una de las voces más reconocibles de aquel momento. Lee, pianista de formación clásica, cantautora, diseñadora y compositora estadounidense, fue cofundadora y vocalista de la banda de metal alternativo Evanescence.
En 2006 llegó a ser incluida en el puesto 69 entre los 100 mejores vocalistas de metal de todos los tiempos por la revista Hit Parade, y, en el mismo año, su banda fue elegida como la mejor de metal de 2006 por la Rolling Stone.
Lee siempre tuvo un estilo muy reconocible, marcado por su uso ocasional de maquillaje gótico y el gusto por la ropa de estilo victoriano. Ella también diseña su propia ropa, incluyendo los utilizados en el video musical de “Going Under“, el vestido que llevaba en los Premios Grammy de 2004, y el vestido usado para la portada de The Open Door.
En los conciertos, acostumbraba a llevar un corsé y medias de red, así como faldas largas y botas hasta las rodillas. Tuvo un piercing en la ceja izquierda, como es visible en la portada de Fallen. Muchos fans copiaban su estilo, y siempre fue alabada por negarse a imitar a otras celebridades que usan la “atracción sexual” en su música.
Es indudable que Lee tenía una voz increíble y carismática, unos llamativos ojos y una belleza peculiar. Sin pretender ser un icono sexual, en el 2006 la revista Blender la listó como una de las mujeres más atractivas en el rock junto a cantantes como Joan Jett, Courtney Love y Liz Phair.
En los últimos años no se ha sabido mucho sobre ella. Hoy tiene 34 años, y después de haber tenido que enfrentar una demanda contra su ex sello discográfico en el 2014, ella y la banda han creado un sello independiente.
En 2014 anunció su nuevo y primer álbum como solista, Aftermath, que es la banda sonora para la película War Story. En 2016 ha publicado el segundo, Recover, Vol. 1. Su vida también ha cambiado con el nacimiento de un hijo llamado Jack Lion, que actualmente tiene tres años.
Durante el año pasado, en paralelo al lanzamiento de The Ultimate Collection, una caja recopilatoria de Evanescence que incluye el disco de lados B Lost Whispers, Amy Lee grabó también un disco de canciones infantiles llamado Dream Too Much. En la grabación participó toda su familia, incluyendo a su padre y sus hermanas cantando.
Sobre él ha dicho lo siguiente:
“Evanescence es fabuloso porque me permite llegar a lugares diferentes todo el tiempo, pero no a todos. El disco para niños es algo completamente diferente que rompe todos mis hábitos artísticos con nuevas reglas y me permite hacer algo totalmente libre. Y está bueno, porque al ser un disco infantil evito toda la presión que siempre genera la banda.”