Los 80 son, sin duda, una de las mejores épocas de todos los tiempos. Su moda, sus tendencias y su música marcaron un antes y un después en nuestras vidas. Sin embargo, quizás no hayas caído en que algunas de las situaciones que veíamos durante esos años, en realidad entrañaban riesgos, y serían impensables a día de hoy.
No es que los padres de los 80 fueran descuidados, es que tanto la forma de educar como las normas y la tecnología han cambiado sustancialmente. Aunque quizás retomar algo de aquellos años no nos vendría nada mal, hay ciertos aspectos que hoy son prácticamente “imposibles.”
Comer alimentos procesados
En los años 80 no se tenía tanta información acerca de lo perjudiciales que eran para la salud los alimentos procesados y precocinados. Además eran una novedad, por lo que los padres no dudaban en ponerle a sus hijos pizzas para microondas, postres, purés de patatas precocinados…
Hoy en día, sin embargo, intentamos alejar a los niños todo lo posible de los colorantes y conservantes, y buscamos para ellos alimentos orgánicos, bajos en grasa y nutritivos. La alimentación sana se ha convertido en un punto muy importante de la educación infantil.
Juegos y juguetes peligrosos
En la década de los 80, los niños jugaban solos en la calle, por lo que los padres no eran conscientes de si sus hijos jugaban con columpios oxidados, con tirachinas o cualquier otro tipo de juegos y juguetes peligrosos.
Sillas de seguridad del coche
Muchos padres tenían sillitas para sus hijos en el coche pero no siempre las usaban. No eran obligatorias ni contaban con la tecnología de hoy en día, por lo que no les daban tanta importancia y no pensaban que podía ser vital para la seguridad de sus hijos.
Ir en bicicleta sin casco
No es que no existieran los cascos, es que nadie los utilizaba. Hoy en día es obligatorio, especialmente en los niños, en numerosas ciudades. Por aquel entonces los padres no eran conscientes de las traumáticas lesiones cerebrales que podía causar el no usarlos.
Quedarse solo en casa
Hace algunas décadas, era muy común que los padres dejaran solos a sus hijos en casa. Los niños volvían del ‘cole’ y esperaban en casa a que sus padres llegaran del trabajo. Además, durante los años 80 esto aumentó sustancialmente debido a que se disparó la tasa de divorcios y aumentó la participación materna en el trabajo fuera de casa.
Hoy en día esto resulta impensable. A los padres no se les ocurre dejar a sus hijos solos en casa hasta que no tienen una edad mínima.
Comprar tabaco y alcohol
Hoy parece una auténtica locura, pero hace unos años era normal que los padres mandaran a sus hijos a comprarles una cajetilla de tabaco, una cerveza o una botella de vino. Ellos se ahorraban el paseo y los niños se llevaban una propina a la vuelta.
Ver películas para adultos
Actualmente tenemos muy en cuenta el control parental, pero en los años 80 los niños veían películas con escenas violentas, de miedo o sexuales.
Cuidar de los hermanos más pequeños
En los 80 era muy típico que cuando los padres tenían que salir para algo, dejaran a sus hijos mayores, que a lo mejor solo tenían 7 u 8 años, a cargo de sus hermanos pequeños, que podían ser bebés. Hoy en día, si dejamos a nuestros hijos a cargo de alguien, siempre buscamos que se trate de personas cualificadas para ello.
Beber agua de cualquier sitio
Si los niños tenían sed, bebían agua de cualquier sitio, por ejemplo de la manguera. Sin duda, no era lo más seguro, ya que éstas tienen productos químicos tóxicos, pero la mayoría de los padres no tenían conocimiento de ello. Hoy en día, ni siquiera los dejamos beber del grifo.
Salir a jugar solos
Actualmente los niños están apuntados a un sinfín de actividades extraescolares, deportes… Sin embargo, en los 80 el único entretenimiento que tenían los niños por las tardes era salir a jugar a la calle con sus amigos. Es cierto que no había tanto peligro como hoy en día, pero aún así podían correr riesgos.