Y ellas están muy orgullosas de sus habilidades.
Todos mentimos en redes sociales, sobre todo en las fotografías. Ponemos siempre nuestro mejor ángulo, con la luz ideal y usamos unos cuantos varios filtros que hacen que nos veamos mucho más bellos de lo que somos en verdad. Si está bien o mal eso es cosa de cada uno, pero la realidad es que sucede y mucha gente lo hace.
Aunque, como en muchas otras cosas de la vida, nunca seremos acá en Occidente tan buenos para manipular fotos como lo hacen los asiáticos. Sobre todo las muchachas son unas expertas a la hora de arreglarse el rostro de tal forma que casi no parece el de ellas.
Y sólo lo hacen utilizando aplicaciones que tienen en el teléfono, que les permiten photoshopearse y “hacerse de nuevo”. Porque acá no aplican simplemente un filtro para mejorar algunas cosas, sino que ellas realizan toda una operación sobre sus rostros.
Aplicaciones como Beauty Camera o Meitu -disponibles en Occidente- permiten agrandar los ojos, adelgazar la cara y nariz, arreglar la piel, disminuir el tamaño de la cabeza y muchas otras cosas que les permiten a estas chicas verse de esa forma en las fotos.
No se arreglan sólo la cara, sino que también pueden alargar su estatura o reducir su peso utilizando estas aplicaciones de celular.
Aunque no es algo sencillo, al ser simplemente una aplicación de celular conseguir la precisión necesaria para que el arreglo quede bien no es sencillo, porque la magia detrás de estas transformaciones es que la gente no sepa qué están arregladas.
Obviamente todos asumen que se utilizaron filtros, pero intentan que se vean lo más naturales posibles y que las personas que ven sus fotos crean que realmente son así, cuando no lo son.
Y si le preguntas a estas chicas, ellas no están ni ligeramente avergonzadas de lo que hacen ni lo consideran algo malo, de hecho, son sumamente orgullosas de sus habilidades para arreglar su cara -creanme que utilizar esas aplicaciones y no quedar deforme, es muy complicado-.