10 Cosas que podrían pasarte si donas tu cuerpo a la ciencia

Esto es lo que podría pasarle a tu cuerpo si decides donarlo a la ciencia:

1. Te harán pruebas de enfermedades

Si eres positivo en VIH, Hepatitis o Sífilis, el cuerpo no puede ser usado. A menos que busquen específicamente investigar alguna de estas enfermedades.

2. La ciencia cubre los gatos de tu funeral

Perder a un ser querido no sólo es doloroso, sino también costoso. Si donas tu cuerpo a la ciencia, la mayoría de las compañías encargadas de hacer las pruebas, cubrirán con los gastos de tu funeral.

3. Puedes convertirte en un muñeco de pruebas

Tu cuerpo puede ser usado como muñeco de pruebas en accidentes automovilísticos controlados, y así las fábricas de automóviles pueden añadir medidas de seguridad realistas.

4. Puedes ser congelado para siempre

Algunos cuerpos son congelados de manera indefinida, con el objeto de ser estudiado por estudiantes de medicina o nuevos científicos.

5. Puedes ser Plastinado

Tu cuerpo puede convertirse en una “obra de arte” en museos biológicos o Universidades de Medicina.

6. Puedes pudrirte

Las granjas de cadáveres son lugares donde los cuerpos son estudiados al aire libre a medida que se van descomponiendo.

7. Tus deformidades pueden ser famosas

Si sufres de alguna deformidad ósea o sufriste de algún accidente que haya cambiado el aspecto de tus huesos, puedes terminar en un museo de medicina.

8. Te cubrirán el rostro mientras hacen pruebas

Con el fin de mantenerte anónimo y que los estudiantes se sientan seguros, te cubrirán el rostro y las partes privadas, a menos que estas partes necesiten ser estudiadas. En la Universidad de California existe un cartel que dice: “Esta persona ya no está aquí, él está a salvo y tú también”.

9. Pueden venderte al mercado negro

Aunque esto no es tan común, existe una mínima posibilidad de que tu cuerpo termine en las manos equivocadas y si tus órganos están sanos, pueden ser vendidos en el mercado negro.

10. Puedes explotar

El ejército de los Estados Unidos recibe cadáveres con el objetivo de probar nuevos explosivos y estudiar el daño causado.