A los 47 años, la famosa cantante Mariah Carrey se sometió a una operación de banda gástrica para bajar de peso de una vez por todas. Y es que, según informó Page Six, la artista llegó a sentirse avergonzada luego de haber recibido cientos de críticas en las redes sociales que la denostaban por su físico. Pero, además, Carey señaló que no todo era un asunto estético, ya que el exceso de kilos también la obligaba a hacer un esfuerzo muchísimo mayor para bailar y desplazarse a través del escenario.
“Mariah siempre se ha sentido orgullosa de sus curvas, pero este verano, cuando terminó los conciertos en el Caesars Palace de Las Vegas y se fue de gira con Lionel Richie, notó que se le hacía más difícil bailar. Además, estaba recibiendo muchas críticas sobre su cuerpo”, explicó una fuente al medio Page Six.
Así es cómo se veía Mariah hasta hace pocas semanas atrás.
Sin ánimo alguno de criticar, es evidente que la cantante se encontraba con un sobrepeso. Y fue por ese motivo que decidió someterse a una intervención quirúrgica.
La operación, realizada por un experto cirujano en Beverly Hills, California, hace poco más de un mes, implica extirpar parte del estómago para que la paciente se sienta saciada más rápidamente y consuma menos alimentos. Además, Page Six añadió que el tiempo de recuperación es rápido y la cicatrización mínima, pues la intervención se puede hacer a través de una pequeña incisión. “Mariah ya está viendo buenos resultados y se siente mucho mejor”, ha añadido el medio.
Así es cómo luce actualmente.
Un cambio increíble, ¿no crees?
La artista perdió alrededor de 30 kilos como producto de esta intervención. Ella misma tuvo palabras para referirse a la situación.
“Nunca me pesé. La gente pensará que miento, pero es verdad. Soy una chica alta y de huesos grandes, así que siempre peso más. Mi báscula era probarme un vestido que hacía tres años me quedaba bien y según me quedara bien o mal así estaba mi cuerpo”, señaló Carey.
Pero, sin importar nada de aquello, lo bueno es que Mariah está feliz por dentro y por fuera con su nueva apariencia.
Revisa el “antes y después” a continuación.
Para aplaudirle, ¡y de pie!
