Algo tienen las peluquerías que hacen que las amemos o las odiemos sin término medio. O bien las odiamos porque allí nos han destrozado el cabello, o las amamos porque nos han dejado tal y como queríamos.
Los estilistas normalmente suelen ser personas bastante simpáticas que pueden presumir de trabajar en aquello que les gusta. Es normal encontrarse peluqueros a los que se les nota que disfrutan con su trabajo y viven cada día como el primero. Sin embargo, no es oro todo lo que reluce. Sin duda alguna, si hay algo que puede amargarle la existencia a un estilista es un cliente “especial”.
Ya sea por falta de higiene, por una infección de piojos o por unos enredos imposibles de desenmarañar, trabajar en una peluquería es todo desafío. En algunas ocasiones, los peluqueros se ven forzados a enfrentarse a problemas que, a veces simplemente no son complicados, simplemente son tan desagradables que van contra la salud.
Descubre, a continuación, algunas de las historias más terroríficas compartidas por algunos estilistas a través de las redes. Definitivamente, a partir de ahora respetaré mucho más la figura del estilista.
1. ¡Frótate bien!
“Como peluquera que soy, me gustaría hacer un llamamiento para que todas las personas se laven bien detrás de las orejas.
Más de una vez me he encontrado con individuos que se olvidan de limpiarse bien el pliegue de detrás de las orejas llegando a almacenar una mugre amarilla/blanca/verde realmente desagradable… ¡Además de ser repugnante huele que apesta!” – Pcbzelephant
2. Nudos y más nudos
“En una ocasión, una mujer trajo a su hija de 8 años a la peluquería para que la peinásemos. A pesar de que la madre era bastante borde, la pequeña era muy dulce y educada.
Por desgracia, aquella mujer nunca se hizo cargo del pelo de su hija, por lo que la pobre niña tenía el cabello súper sucio y enmarañado. Necesitamos a cuatro personas trabajando durante unas tres horas para conseguir desenredar aquella bola de pelo para poder empezar a limpiarlo y poder utilizar un cepillo con normalidad. Nunca olvidaré aquella niña tan dulce y lo agradecida que estuvo con por su pelo.” – LeavingNYCtoday
3. El caso imposible
“Mi peluquera me contó que en una ocasión, una mujer llevó a su hijo a que le cortasen el pelo.
Al parecer, el pelo de aquel niño no había conocido ningún peine en toda su vida. La peluquera se pasó 45 minutos tratando de quitar todos los nudos que tenía el cabello del chico hasta que finalmente se dio por vencida, no le merecía la pena perder tanto tiempo en un simple corte de pelo.” – DiglettUsedFly
4. Extensiones de por vida
“Recuerdo que una vez vino una mujer que había pedido cita para quitarse unas extensiones. La peluquera que se las colocó debió de decirle que no podía estar con ellas más de 3 meses.
Nadie le dijo nada a la señora por lo que estuvo con ellas durante más de siete meses.
Ahora tenía el pelo natural completamente enmarañado desde la raíz con la extensiones. La única opción que tenía era raparse por completo.” – Hinky28
5. Peinados con sorpresa
“Mi madre trabajó como peluquera durante los años sesenta. A veces me cuenta cómo alguna de sus clientas no se lavaba el pelo durante semanas para poder aguantar el extraordinario peinado que le hacían en la peluquería, simplemente se las arreglaban para mantener la forma utilizando laca.
Este forma de cuidar el cabello hacía que en alguna ocasión mi madre tuviera que eliminar de la cabeza de algunas mujeres pulgas, piojos e incluso cucarachas.” LibraryLuLu
6. Champú natural
“Mi madre una vez me contó la historia de un tipo que fue a la peluquería portando algo extraño en la cabeza.
Cuando mi madre se fijó con detenimiento pudo comprobar que aquel hombre tenía toda la cabeza llena de caca de pájaro. Al parecer, algún ave de gran tamaño le había cagado en la cabeza y aquel nombre no se dio cuenta, o eso dice él.” -Skivian
7. Peligro por contagio
“En una ocasión, mi hermana se contagió de sarna por cortarle el pelo a un niño.
Al parecer la madre sabía que el niño la padecía y no le dijo nada a mi hermana hasta que terminó el trabajo.” – 82workthrowaway82
8. Aceite natural
“Hace mucho tiempo tuve que lavar y cortar el pelo a una adolescente que no se había lavado el pelo en meses.
Después de cortarle el cabello traté de lavarle el pelo con algo de champú sin mucho éxito, tenía tanta grasa acumulada en el pelo que hacía que el agua resbalase y no llegase a humedecer el cabello.
He visto muchas cosas durante mi etapa como estilista pero aquella fue sin duda alguna la peor.” – Bzookee
9. Caldo de cultivo
“Una vez tuve a una mujer con una melena que le llegaba hasta la mitad de la espalda. Cuando se sentó en la silla y comencé a peinar el pelo, un desagradable olor me vino de su cabeza.
En un primer momento parecía que tenía el cuero cabelludo un poco seco, sin embargo, debido a aquel olor insufrible miré un poco más de cerca hasta ver que lo que parecían ser copos blancos de piel seca resultaban ser nidos de liendres. Tenía toda la cabeza llena de huevos de piojos. Fue algo asqueroso.” – Pixelmeow
10. Drama en la peluquería
“Esta es una historia de terror un poco diferente. En una ocasión mi peluquera recibió a una mujer con una melena que le llegaba más allá del trasero. Al parecer quería cortárselo y donarlo todo para ayudar a personas con cáncer. Cuando la peluquera comenzó a cortar la melena, la mujer empezó a llorar sin parar.
La estilista le preguntaba constantemente si se encontraba bien y la mujer se limitaba a decir que lo hacía por un bien mayor y que siguiese adelante ignorando por completo sus lágrimas. Los clientes que entraban y veían aquel panorama probablemente asumieron que aquella mujer estaba siendo mutilada por mi peluquera.” – PoopsieDoodles