Una de las películas más populares de 1995 fue “Corazón Valiente” (“Braveheart” en Inglés), una épica cinta dirigida y protagonizada por Mel Gibson que retrataba la vida del héroe nacional escocés William Wallace, en la primera independencia de Escocia.
La cinta, que obtendría cinco premios Oscar (entre los cuales se encontraba la estatuilla al mejor director y a la mejor película), y que, por su crudeza y realismo, quitaba el aliento en las escenas de las batallas, narraba la revuelta popular liderada por el líder escocés William Wallace -quien de niño había visto como su padre y su hermano habían muerto a manos de los ingleses- contra el despiadado rey inglés Eduard I, apodado “Longshank” o “El Zanquilargo”, quien quería hacerse con la corona de Escocia aprovechando que el último monarca escocés no había dejado herederos.
Cuando su amada Murron McGlannough, con la que se había casado en secreto, era asesinada por el sheriff de Lanark, después que unos soldados ingleses intentaran violarla, Wallace se ponía a la cabeza de la rebelión para sacudirse del yugo inglés, secundado por Hamish Campbell, su amigo de la infancia y el carismático irlandés Stephen “El Loco”, infringiendo a los ingleses una gran derrota en los campos de Stirling.
Luego que Wallace fuera nombrado “Guardián de Escocia” por los nobles, el dubitativo Robert The Bruce, heredero del trono de Escocia, se debatía entre seguir los consejos de su oportunista padre leproso de pactar con Inglaterra y su deseo de seguir los pasos de Wallace. Consciente de que los ingleses estaban reorganizando otro gran ejército, Wallace invadía el norte de Inglaterra y conquistaba la ciudad de York, encontrando una inesperada aliada en la esposa del príncipe de Gales, la princesa Isabelle, a quien el rey Eduardo I había enviado a negociar para ganar tiempo, y con quien entablaba un breve pero intenso romance.
En la batalla de Falkirk, sin embargo, Wallace era vilmente traicionado por los nobles de su país, resultando herido con una flecha y escapando apenas de los ingleses. Después de vengarse de los nobles que lo habían traicionado, Wallace reorganizaba la resistencia, aunque sabía que sin el apoyo de la nobleza era imposible continuar la lucha. Convertido ya en un mito nacional, a petición de Robert The Bruce el héroe accedía a reunirse con él, pero la reunión en realidad era una trampa urdida por el padre de Robert.
William Wallace, para desesperación del joven Bruce, era capturado por los ingleses, quienes en Londres lo torturaban y decapitaban, aunque su sacrificio no había sido en vano. Eduardo I de Inglaterra fallecía y lo sucedía su débil y homosexual hijo, quien ignoraba que la embarazada princesa Isabelle esperaba un hijo de Wallace.
Tiempo más tarde Robert The Bruce se convertía finalmente en rey de Escocia, pero antes debía rendir vasallaje al monarca inglés. En vez de ello, y mirando el mismo paño con la flor que Murron le había regalado a William Wallace cuando ambos eran niños, Bruce decidía luchar y arengar a sus soldados (entre los cuales se encontraban Hamish Campbell y Stephen “El Loco”), venciendo en la batalla de Bannockburn al ejército inglés y liberando de paso a Escocia.
A más de 20 años del estreno de esta recordada película, así lucen hoy sus actores y actrices principales:
1) Mel Gibson (William Wallace):
2) Angus McFadyen (Robert The Bruce):
3) Brendan Gleeson (Hamish Campbell):
4) James Cosmo (Campbell):
5) David O’Hara (Stephen “El Loco”):
6) Patrick Mc Goohan (Rey Eduard I, “Longshank”):
7) Princesa Isabelle (Sophie Marceau):
8) Catherine McCormick (Murron McClannough):
9) Brian Cox (Argyle Wallace):
10) Peter Hanly (Principe Eduardo):
11) Alun Armstrong (Mornay):
12) James Robinson (Joven William Wallace):