Un ataque cerebral casi la mata durante cirugía por querer parecerse a Barbie. Ahora va por MÁS

Trabaja como modelo de webcam y está obsesionada con las cirugías…

Amanda Ahola, de Jyväskylä, una ciudad de Finlandia, tiene bastante clara su meta: quiere convertirse en una muñeca como Barbie, pero de carne y hueso. El procedimiento no es fácil y requiere de una gran cantidad de cirugías, junto con todos los riesgos que esto implica. Esta vez, su apuesta fue muy alta.

Amanda trabaja como una chica de cámara web para complacer a sus seguidores, con el dinero que ha recaudado se ha hecho algunas intervenciones. Sin embargo, un sugar daddy se ofreció a pagarle una cirugía de aumento de pechos.

Ahora llega hasta la talla 30GG, pero su suerte pudo ser muy distinta…

 

Durante plena operación, Amanda sufrió un ataque cerebral y su cerebro se inflamó sometido bajo la presión del cráneo.

“En mi última cirugía casi muero. No recuerdo mucho, pero tengo flashbacks de entrar en el cuarto de operaciones y luego despertar de un sueño muy extraño. Ahí estaban mi madre y novio, Alekski. Mi madre no sabía que tendría una intervención.

Empezaron a llorar, mi mamá me dijo que algo pasó en la cirugía y me preguntó si podía recordarlos, porque el día anterior no lo había hecho”.

Amanda Ahola.

La razón estaba bastante justificada: Nina, su madre, recibió un llamado del hospital en el que le dijeron que su hija estaba en emergencias y podía morir. “En el peor de los casos, ya está muerta” fue parte de las palabras que la devastaron por completo.

Sin embargo, aunque Amanda pensó que sería el fin de los cirugías -pero no se arrepentía de haberlo hecho- ahora considera levantarse el trasero, pero probando con anestesia local.

“Mi ambición número uno es lucir plástica, lo más plástica que se pueda. Barbie está muy cerca de la perfección y quiero llegar a ser tan perfecta como sea posible.

Cuando la gente me dice falsa o Barbie, me hace realmente feliz”.

Amanda Ahola.

No descarta que sea adicta a las cirugías, pero también sabe que no podría vivir sin maquillaje. Sus padres han intentado llevarla al psiquiatra, pero no pueden obligarla. Así mismo, seguirá con su trabajo en las cámaras, a pesar de los problemas que le ha causado con su novio.