Las mentes científicas modernas se dedican a solucionar problemas tan globales como la exploración espacial, la búsqueda de tratamientos para enfermedades incurables, aumentar la esperanza de vida humana… Básicamente, a cuestiones decisivas para el avance de la humanidad. Pero a veces, también existen mentes inquisitivas que se fijan retos realmente difíciles, como, por ejemplo, si las personas pueden nadar en jarabe o qué piensan las gallinas sobre los humanos.
Hemos recopilado para ti 15 estudios científicos inesperados y un tanto extraños, cuyos resultados llaman mucho la atención.
1. Hip hop, música de psicópatas
Los científicos de la Universidad de Nueva York descubrieron que los psicópatas prefieren escuchar hip-hop. Se basan en un estudio con 200 voluntarios a los que ponían en diversos turnos hasta 260 canciones de diferentes géneros.
A diferencia de Hannibal Lecter, protagonista de la película de culto “El silencio de los inocentes” y un gran aficionado a la música clásica, el estudio detectó que los participantes, con signos evidentes del síndrome psicopatológico, eran aficionados al hip-hop y R&B.
2. El azúcar es una droga
Los científicos de la Universidad de Tecnología en Queensland, Australia, equipararon al azúcar con las drogas. En su trabajo científico precisan que esta sustancia provoca adicción y el efecto de su consumo es similar al de la cocaína.
El hidrato de carbono de sacarosa, al igual que esta droga, altera el estado de ánimo, estimula el sentido del disfrute y provoca en quien la consume la necesidad de buscar un nuevo dulce. Los científicos reforzaron su tesis con los resultados de los experimentos con roedores, que entre la droga y el azúcar, con más frecuencia optaban por esta última.
3. Las personas, formando un grupo, se ven más atractivas
“El efecto de las animadoras“, también conocido como el ”efecto de las Spice Girls“, fue nombrado por primera vez en la serie “Cómo conocí a tu madre” por el personaje Barney Stinson. Más tarde fue comprobado por los científicos de la Universidad de California.
El estudio demostró lo siguiente: las personas, en un grupo, se ven más atractivas que por separado. ¡Una buena razón para formar un grupo musical o encontrar intereses en común!
4. Si tienes amistad con tu expareja, probablemente seas un psicópata
Científicos de la Universidad de Auckland, en Michigan, decidieron buscar en el pasado y encontrar personas que quedaron “como amigos” con sus ex. El estudio se centra no tanto en las personas que todavía se preocupan por alguien que hasta hace poco les importaba mucho, sino en aquellos que aún necesitan algo de su pareja anterior (apoyo emocional, económico o ayuda en el trabajo, por ejemplo). Los resultados demostraron que estas personas con mayor frecuencia manifiestan rasgos psicopáticos.
5. La música country genera suicidios
Aficionados a la música country, ¡precaución! Los científicos de las universidades de Auburn y Wayne, en EE.UU., encontraron una correlación directa entre las estadísticas de suicidios en las ciudades y la cantidad de emisoras de radio con música de este género. La líder en estas trágicas estadísticas resultó ser la ciudad de Nashville, capital de este género musical.
Después de más de mil canciones populares, los investigadores descubrieron que las letras de las canciones de country se pueden dividir en varias frases de este tipo: “nuestro Señor es omnipotente“, ”no, ya no soy tan bueno como antes“, “¿en quién se convirtió la mujer de mis sueños?” y ”¡vamos a emborracharnos, hermano!” Puede no parecer tan grave, pero, probablemente, la rotación constante de estos pensamientos dirija la conciencia de ciertas personas en una sola dirección: la depresión.
6. Los dueños se parecen a sus perros en un 80% de los casos
Sobre el hecho de que los perros se parecen a sus dueños, han pensado y bromeado probablemente todos. Pero ahora la broma se ha convertido en estudio científico. Investigadores japoneses realizaron un experimento: fotografiaron por separado a los dueños y sus mascotas. Pidieron a los estudiantes unir las parejas. El 80 por ciento de las respuestas fueron correctas.
Los psicólogos establecen que la persona elige a su mascota basándose en los mismos principios con los que elige a su media naranja en el amor: la apariencia similar, como nos advierte el cerebro, supone la compatibilidad de los genes. Gracias a este instinto, a menudo elegimos a favor de aquellos que tienen características similares a las nuestras.
7. Bajo los efectos del alcohol, la persona no deja de ser la misma
¿A quién no le ha pasado lo siguiente? Despiertas con resaca y plagado de vagos recuerdos tras una divertida fiesta e inmediatamente pones excusas a todo lo sucedido porque estabas borracho. Por desgracia, se ha demostrado que esta excusa ya no es válida.
Estudios publicados en el sitio web “Ciencia Psicológica Clínica“ desmontan por completo el mito sobre la existencia de un ”álter ego en estado de embriaguez”. En definitiva, lo que un sobrio está pensando, un borracho lo suelta.
8. La regla de los cinco segundos no funciona
Si todavía tenías tus dudas en relación a la “regla de los cinco segundos”, ya todo te quedará claro. Los resultados de un estudio realizado en la Universidad de Rutgers (EE.UU.), demuestran que los 5 segundos son más que suficientes para que las bacterias entren en los alimentos. La cantidad de microorganismos depende del entorno y el tipo de superficie, pero en cualquier caso, la contaminación de los alimentos se produce instantáneamente.
9. Los gatos actúan por interés
Si eres un gatófilo empedernido y consideras a estos felinos los animales más amables del mundo, omite este párrafo. Y si no, ¡te lo hemos advertido!
Investigadores japoneses han demostrado que los gatos son animales egoístas que actúan por su propio interés: reconocen perfectamente su nombre y casi siempre oyen cuando los llaman, pero no siempre responden: lo hacen cuando saben que recibirán un premio.
¿Por qué, en esta cuestión, los gatos son tan diferentes a los perros? Los investigadores creen que esto puede explicarse por la diferente historia evolutiva de los animales: los perros fueron domesticados 6 mil años antes. Además, a los gatos nadie los adiestraba y tampoco vivían demasiado cerca de los humanos.
Creemos que es solo un componente más de su inefable encanto y un poco de malicia, nada más.
10. Una de cada cuatro personas sufre una “Facebook-depresión”
Si estás preguntándote si tus seres queridos y hasta tú mismo sufren de depresión, ahora tendrás un nuevo motivo para la preocupación. Según datos de investigadores irlandeses, un 25 por ciento de los usuarios de las redes sociales sufren de “Facebook-depresión“ (que no debe confundirse con la depresión convencional).
La Facebook-depresión puede ser causada por una sensación de soledad, producida cuando las publicaciones apenas obtienen ”Me gusta“. Sin recibir notificaciones de aceptación, muchos empiezan a preocuparse de si les gustan o no a sus amigos. Así que no escatimes en dar a “Me gusta”, amigo, ¡lo superaremos juntos!
11. ¿Las gallinas te consideran atractivo?
Estamos acostumbrados a pensar que nuestra percepción de la belleza la dictan las normas sociales y tradiciones. Sin embargo, ¿es posible que algo en nuestra mente reaccione a lo atractivo? Los científicos de la Universidad de Estocolmo enseñaron a las gallinas a reconocer los rostros y reaccionar a ellos.
Las aves recibían comida cuando picaban la foto de una persona. Luego, a partir de estas imágenes, han generado otros rostros más, pidiendo a los estudiantes evaluar cuáles de estos resultaban ser más atractivos. Después, les tocó a las gallinas hacer su elección.
Las gallinas tenían casi los mismos gustos que los estudiantes. Los científicos todavía no pueden explicar este fenómeno, ¡pero el hecho de que nuestro atractivo pueda ser evaluado por gallinas entrenadas no deja de alegrarnos!
12. Las vacas con un nombre producen más leche
Si has pensado dedicarte a la agricultura en un futuro o bien tienes una granja virtual en tu tableta, tenemos para ti un truco valioso y avalado por científicos británicos. Asegúrate de ponerles nombres a cada una de tus vacas y llámalas así con frecuencia. Como aseguran los científicos de la Universidad de Newcastle, esto permitirá que tus vacas produzcan más leche.
13. Nadar en un jarabe es igual de fácil que en el agua
La respuesta a esta pregunta puede parecer obvia: un jarabe pegajoso y viscoso definitivamente no es lo más adecuado para la natación. ¡Pero la ciencia no se basa en suposiciones! Científicos de la Universidad de Minnesota crearon un entorno de prueba: en una piscina de 25 metros de profundidad llena de agua añadieron un espesante alimenticio y goma de guar y realizaron un experimento con 16 voluntarios.
El estudio reveló que no existen diferencias comparativas: en el agua y en el jarabe se nada, aproximadamente, a la misma velocidad.
No sabemos para qué te puede servir esta información, pero ya contamos con un par de voluntarios dispuestos a experimentar la natación ¡en una piscina de cerveza!
14. Un sueño sano, clave para una figura esbelta
Científicos de la Universidad de Washington realizaron un estudio acerca de la correlación entre las horas de sueño y el sobrepeso. ¡Y tienen una gran noticia que darnos! Durante el estudio, en el que comparaban a mil pares de gemelos, sus horas de sueño y su peso, se apreció que los sujetos que dormían 9 horas y más durante la noche tenían un índice de masa corporal inferior a sus hermanos o hermanas que dormían menos. Así que si no consigues quitarte un par de kilos de más, piensa bien si tienes que ir corriendo a un gimnasio o simplemente echarte a dormir.
15. Una copa de vino tinto puede sustituir a una hora de deporte
Si, siguiendo las recomendaciones de los científicos del punto anterior, has dormido muy bien, pero los kilos de más todavía te acompañan, investigadores canadienses de la Universidad de Alberta ¡corren en tu ayuda con este gran descubrimiento! Según un estudio reciente, una copa de vino tinto tiene en nuestro cuerpo un efecto similar a un entrenamiento de una hora en el gimnasio.
No obstante, el estudio se llevó a cabo solo en ratas, no en humanos, pero somos optimistas, ¿verdad que sí?