Según el Instituto Británico de Ingeniería y Tecnología, el 83% de los padres no puede responder las preguntas de los niños. Al final resultó que la mayoría de las mamás y los papás tienen miedo de escuchar otro “por qué” de un niño inquisitivo. Además, dos tercios de los participantes en el estudio admitieron que para ellos era más fácil mentir que mostrarle al niño que no sabían algo. Pero no te apresures a juzgar a esos padres: hasta los científicos están lejos de saberlo todo.

Hicimos una lista de preguntas infantiles capaces de desconcertar a cualquier adulto.

1. ¿Cuántos años puede vivir una persona?

Son llamadas personas longevas aquellas que tienen 90 años o más. Hace mucho que los científicos concuerdan en que las mujeres viven más tiempo que los hombres. Según el Libro Guinness de los Récords, la persona más anciana del mundo fue la francesa Jeanne Calment que murió en el año 1997, cuando tenía 122 años de edad. Sin embargo, en 2017 se supo de un abuelo de Indonesia, Ghoto, que vivió 146 años. Sus documentos fueron revisados: Mbath Gotho realmente nació en diciembre de 1870.

La cantidad máxima de años que una persona puede vivir sigue siendo un misterio.

2. ¿Por qué tenemos diferentes tipos de sangre?

Las diferencias individuales de la sangre de las personas se conocieron a principios del siglo XX. Este descubrimiento fue realizado por el investigador vienés Karl Landsteiner en el año 1900. Sus experimentos llevaron a la conclusión de que existen 4 grupos sanguíneos: 0 (I), A (II), B (III) y AB (IV). Hoy, la sangre del donante se selecciona teniendo en cuenta la coincidencia máxima de antígenos, es decir, de cierta estructura en la superficie celular. Si estos resultan ser diferentes a los de la persona que los recibe, el cuerpo no los aceptará.

Pero el interrogante de por qué tenemos diferentes tipos de sangre sigue abierto. Existe la opinión de que en los albores de la civilización las personas no tenían antígenos y que la sangre era predominantemente del grupo 0. La formación de antígenos, presumiblemente, fue influenciada por el clima, los alimentos y otros factores externos.

3. ¿Por qué caminamos en círculo con los ojos cerrados?

Seguramente has escuchado que en cuanto una persona se pierde, comienza a caminar en círculos. Lo mismo ocurre si uno se venda los ojos o simplemente los cierra: primero girará hacia un lado y luego comenzará a dar vueltas por el espacio.

El investigador del Instituto Max Planck de Cibernética Biológica en Alemania, Jan Souman, realizó una serie de experimentos y descubrió que este hecho está directamente relacionado con la falta de un punto de referencia en el espacio. Al no tener ningún objeto ante los ojos, una persona confía en sus sensaciones y gradualmente se desvía del camino recto. Pero hay otras explicaciones, basadas en la asimetría del cuerpo. Según esta, una pierna puede ser más fuerte y más larga que la otra, y el paso dado con la pierna derecha (en el caso de los diestros) es más largo.

4. ¿Por qué los animales anticipan un terremoto?

El ser humano supo que los animales pueden prever un terremoto en el año 373 a. C., cuando estos abandonaron la ciudad griega de Hellas unos días antes del desastre natural. Desde entonces, las personas han sido testigos de esta asombrosa habilidad en repetidas ocasiones, tanto con mascotas como con animales salvajes.

Desde los años 70 del siglo XX, los científicos están tratando de descubrir las razones de este comportamiento de los animales. Lo asocian con su aguda capacidad auditiva, y también con la aptitud de reaccionar a la inclinación de la tierra, a los cambios del agua subterránea, y los campos eléctricos o magnéticos.

5. ¿Por qué nos “caemos” cuando dormimos?

La sensación, que científicamente se llama “sacudida hipnótica”, se explica por la contracción involuntaria de los músculos. Algunos científicos la asocian con los reflejos de los primates. Cuando ellos se dormían en las ramas de los árboles, estas sacudidas les permitían sentir el apoyo, manteniendo así el cuerpo en una posición estable.

Según otra versión, una “sacudida hipnótica” puede ser una especie de cambio de la actividad al sueño. En el momento en que nos sobresaltamos, los dos sistemas cerebrales luchan por el control del cuerpo, y el movimiento brusco es la última descarga de energía acumulada durante el día.

6. ¿Cómo funciona la bicicleta?

O formulemos la pregunta con todavía mayor claridad: “¿Qué hace que una bicicleta ruede y por qué no se cae?”. Hasta hace poco, esta pregunta era respondida por dos hechos propios de la física que se enseñan en la escuela: la inercia giroscópica (la capacidad de un cuerpo que gira rápidamente de conservar su posición en el espacio) y el efecto de cáster (dirección constante, basada en la fuerza centrífuga).

Sin embargo, en 2011, el ingeniero estadounidense Andy Ruina construyó un modelo de bicicleta inusual que refutó ambas afirmaciones y, aún así, continuó rodando y mantuvo el equilibrio. Y si bien antes los científicos tenían dudas sobre el efecto giroscópico, ahora saben que ni siquiera hace falta un diseño especial del eje de la horquilla delantera. Aunque, en ese caso, la bicicleta se parecería más a un scooter.

7. ¿Por qué el hielo es resbaladizo?

Los científicos lograron descubrir que el deslizamiento ocurre debido al hecho de que se forma una capa muy delgada de agua en la superficie del hielo. Pero todavía no está completamente claro por qué sucede exactamente.

Los físicos creen que se debe al hecho de que la temperatura de fusión del hielo disminuye cuando aumenta la presión. Así, cuando estás de pie sobre hielo, la capa superior se derrite, lo que hace que se forme agua y te resbales. Pero ni bien te mueves del lugar, el área en el que estabas se vuelve a congelar. Hay quienes creen que el hielo no se derrite por la presión, sino por la fricción. Otro grupo de escépticos está seguro de que el tema tiene que ver con las propiedades naturales del hielo, es decir, que tiene una capa líquida independientemente de cómo la afectes tú.

8. ¿Por qué la gente sonríe ?

Según el psicólogo estadounidense Paul Ekman existen al menos 18 tipos de sonrisas. Entre ellos: la feliz, la falsa, la avergonzada, la seductora, la sarcástica y muchas otras.

En primates, la sonrisa también expresaba una amplia gama de emociones. Inicialmente, mostraban los dientes para expresar agresión. Pero a medida que los monos evolucionaban, comenzaron a dominar otra clase de sonrisa: una muestra de sumisión al dominante.

La “sonrisa refleja” se observa en el ser humano incluso antes de su nacimiento. Se vuelve consciente a los 45 días de vida. Algunos investigadores sugieren que la sonrisa ayuda a los niños a manipular a sus padres: la usan para que los adultos les sonrían en respuesta.

9. ¿Cuándo duerme un tiburón?

¿Por qué surgió esta pregunta, en primer lugar? Porque los tiburones deben estar en constante movimiento para sobrevivir. Esto tiene dos razones: en primer lugar, los tiburones no tienen una vejiga natatoria, así que si se detienen, dejarán de flotar. En segundo lugar, los músculos de su mandíbula son incapaces de bombear agua a través de las branquias.

Durante años, los científicos estaban convencidos de que estos depredadores simplemente no saben descansar, hasta que unos pescadores mexicanos descubrieron cuevas submarinas llenas de tiburones que permanecían allí pacíficamente. Los ictiólogos no se comprometen a afirmar que los tiburones van allí especialmente para dormir. Sin embargo, algunos de ellos sugieren que en estas grutas los animales se encuentran en un estado cercano al trance.

Bono: dónde buscar respuestas

Por supuesto que los investigadores del Instituto de Ingeniería y Tecnología se sintieron mal por los resultados de la encuesta sobre la que te contamos al comienzo de este artículo. Así que, junto con el portal británico para padres, Mumsnet, decidieron publicar en Twitter respuestas a las preguntas más difíciles del mundo de la ciencia y la tecnología.

Tú también puedes poner a prueba tus conocimientos con el hashtag #AskTheEngineers.

Y nosotros, como siempre, esperamos tus historias y opiniones en los comentarios.