Parece increíble, pero las tecnologías a diario afectan a la evolución de los humanos, a su comportamiento y también a su cuerpo. Sin embargo, a menudo, podemos detectar estos cambios solo cuando ya ha pasado un período concreto de tiempo.
A cintinuación presentamos 6 ejemplos inesperados que demuestran cómo los inventos nos han cambiado poco a poco. ¡Sin darnos cuenta!
1. La agricultura y las caries
Tiempo: hace 10.000 años
Qué ha cambiado: las caries se han convertido en un fenómeno mucho más frecuente.
Científicos de las universidades de Cornell y Stanford realizaron un estudio que demuestra que con la aparición de la agricultura, el porcentaje de picaduras en los dientes de los humanos aumentó del 0,8 por ciento al 20, todo ello debido a las ratas.
Los autores de dicho artículo compararon el genoma de Streptococcus mutans, bacteria que causa las caries en los dientes, con los de las que viven en la boca de algunos animales. Y descubrieron que el más cercano a ellos era el habitante de la cavidad oral de las ratas: Streptococcus ratti.
Aparentemente, se trasladó a nuestra boca y evolucionó en una nueva especie hace 10.000 años, cuando la agricultura comenzó a desarrollarse y los roedores empezaron a vivir al lado de los humanos por todo el mundo.
2. Los cubiertos y la oclusión dental
Tiempo: siglo XVIII.
Qué ha cambiado: la mordida (la posición de las mandíbulas entre sí)
La aparición de los tenedores y los cuchillos también ha tenido su efecto significativo en el cuerpo humano. El científico Loring Brace afirma que, hace varios siglos, la mandíbula superior estaba exactamente encima de la inferior. Esta estructura permitía rasgar fácilmente la carne.
Con la aparición de los cubiertos, los alimentos empezaron a cortarse en trozos pequeños y la boca modificó su estructura: la oclusión dental, hoy en día, facilita retirar la comida del tenedor y, además, desmenuzarlo.
3. La bombilla y el ciclo vigilia-sueño
Tiempo: siglo XIX.
Qué ha cambiado: la gente comenzó a ir a dormir mucho más tarde.
En la formación del ciclo vigilia-sueño, el alumbrado público desempeñó un papel importante: los delincuentes aprovechaban activamente la oscuridad, por lo que la mayoría de los ciudadanos decentes preferían volver a casa antes del anochecer y acostarse temprano.
Además, la luz eléctrica viva afecta a la mente de una forma diferente que la de una vela o las lámparas de queroseno: activa los procesos en el cerebro por lo que se tiene menos sueño. Es fácil de entender el avance, imagínate a ti mismo antes de acostarte, en la penumbra de un bar, o por el contrario, en un estadio totalmente iluminado.
4. La ecografía y la proporción por sexos
Tiempo: de 1960 hasta hoy.
Qué ha cambiado: los varones empezaron a nacer con más frecuencia que las niñas.
Gracias a la aparición de la ecografía, los científicos aprendieron a determinar el sexo del feto antes de que naciera.
Mara Hvistendahl, autora del libro “Unnatural Selection”, afirma que el mundo ha perdido 160 millones de niñas en las últimas décadas. Sus madres potenciales, al conocer el sexo del feto, optaron por un legrado. En particular, lo sufrieron los países asiáticos, donde los hombres ocupan una posición mucho más elevada en la sociedad y el bienestar de las mujeres no se aprecia del mismo modo.
5. Internet y enfermedades de transmisión sexual
Tiempo: desde los años 2000 hasta nuestros días.
Qué ha cambiado: la incidencia de enfermedades de transmisión sexual se ha incrementado.
De 1998 a 2002, en la época donde las páginas web para citas ganaron popularidad, en San Francisco, el número de casos de sífilis se incrementó 10 veces. En 2011-2012, también se registró un brote en Nueva Zelanda: el número de enfermedades aumentó cuatro veces en un solo año. La mayoría de los pacientes usaban webs especializadas y, atendiendo a sus testimonios, mantuvieron relaciones sexuales con más de medio centenar de personas en solo tres meses.
Además, según las estadísticas, de los 270 estadounidenses encuestados, que en 2006 conocieron a sus parejas a través de la web de citas Craigslist, solo la mitad utilizaba anticonceptivos.
6. La revolución industrial y los zurdos
Tiempo: de 1870 a 1900.
Qué ha cambiado: la proporción entre diestros y zurdos.
En el mundo, de media, hay 9 veces más personas diestras que zurdas. Sin embargo, en Gran Bretaña, durante el reinado de la Reina Victoria, la proporción de diestros no era del 90, sino del 97 por ciento. Esto lo descubrió Chris McManus, que estudió una gran cantidad de cintas de cine de principios del siglo XX.
La cuestión se fundamenta en que los zurdos eran muy incómodos para las escuelas y los propietarios de las fábricas. Las máquinas, así como el sistema de escritura, estaban preparados para aquellos que utilizaban la mano derecha. Lo más probable es que las personas con mayor control de su mano izquierda incluso fueran objeto de burla de los demás, lo que los obligaba a aprender a desenvolverse con la otra.