¿Qué otros secretos cifró el legendario maestro en sus obras?
Te ofrecemos descubrir el maravilloso mundo de este gran artista.
1. Un error en la pintura Salvator Mundi (“Salvador del mundo”)
Si miras bién la pintura, podrás ver que la esfera en las manos de Jesús es transparente. Leonardo, quién estudió la óptica al derecho y al revés, debería saber que el fondo detrás de la figura de cristal no puede verse de esta manera. Debe aumentar y volverse borroso. No se sabe con certeza por qué el gran artista cometió tal error.
2. Un hecho sorprendente sobre “La última cena”
¿Qué puede unir a Judas y a Jesús en este cuadro? Hay una teoría según la cual la misma persona fue un modelo para ambos. Lamentablemente, no hay forma de saber qué tan cierto es eso.
Sin embargo, según cuenta la leyenda, Da Vinci encontró a su Jesús en el coro de una iglesia, donde se desempeñó como corista. Más tarde, el fresco estaba casi terminado, pero el maestro no encontraba a nadie que le sirviera para la imagen de Judas. Leonardo notó en una zanja a un hombre muy borracho con rastros de vida desenfrenada en su rostro y le pidió su ayuda. Cuando Da Vinci terminó la imagen del apóstol, el modelo admitió que conocía esa pintura, ya que hacía 3 años había trabajado como modelo para la imagen de Cristo.
3. Otro hecho sorprendente sobre “La última cena”
Otro matiz interesante de este fresco: al lado de Judas se ve un salero volcado. Curiosamente, puede ser un claro ejemplo de la creencia de que la sal derramada causa problemas. De hecho, el cuadro representa el momento en que Jesús dice que uno de los reunidos lo traicionará.
4. ¿Este cuadro es obra de Leonardo da Vinci?
La pintura “Retrato de Isabel de Este”, según los científicos, fue creada por el brillante artista. Esto está indicado por un pigmento y una pintura de fondo idéntica a otros cuadros de Leonardo, así como la propia imagen de la mujer, la cual es muy similar a Mona Lisa (en particular, su sonrisa).
5. ¿La dama del armiño?
Sobre “La dama del armiño” realizaron una nueva técnica de escaneo y el resultado sorprendió a los científicos. Resulta que no siempre tuvo ese animal en ella. Al menos 2 variantes de la obra fueron pintadas en el mismo lienzo, antes de que tomara la forma que ahora conocemos. En la primera opción no había ningún armiño, y en la segunda, había un animal completamente diferente.