La apariencia del Príncipe Harry siempre ha sido cuestionada y punto de chismes y comparaciones, no tiene parecido a su legítimo padre Carlos, ni tampoco heredó las características de su madre. No es de extrañar que algunas personas sigan creyendo que el verdadero padre del príncipe no es el hijo mayor de la reina Isabel, sino otra persona. Además recientemente, los chismosos reemplazaron al candidato del papel de padre de Harry. Anteriormente afirmaron que el príncipe era hijo de quien fuera el amante oficialmente reconocido de Lady Diana: James Hewitt.
En la década de 1990, la familia real obligó a Lady Di a realizarle una prueba de ADN a su hijo menor Harry para disipar los chismes y confirmar la paternidad de Carlos. Recién en el año 1995, Diana confesó que había tenido un romance con el oficial James Hewitt. Aunque viéndolo desde otro ángulo, el príncipe Carlos tampoco fue fiel en la relación…
Como el príncipe Harry todavía era un niño, Diana no le dijo al chico por qué necesitaba donar sangre. Quizás el príncipe hasta el día de hoy no tenía ni idea de que sus parientes más cercanos dudaban de su origen real.
El príncipe Felipe fue quien cuestionó más el origen de Harry, nacido en 1984.
Una de las razones de este escándalo fue el hecho de que el príncipe, a diferencia de Carlos y Diana, es pelirrojo.
“Tiene el mismo color de cabello que el oficial Hewitt”, – gritó en una sola voz la familia.
Sin embargo, Diana argumentó pacientemente que James no podía ser el padre de Harry, ya que había tenido una aventura con el oficial después del nacimiento de su hijo menor.
BI- confesó Diana a sus más allegados. Hubo incluso intentos de suicidio …
El mismo Hewitt declaró que su aventura de cinco años con la esposa del príncipe Carlos había sido más que seria. Él y Diana, según James, querían huir de la familia real para vivir juntos. Y cuando su romance gracias a la prensa salió a la luz y se vieron obligados a separarse, él confesó que entonces quiso suicidarse de la desesperación.
Cuando llegó el momento más picante de la entrevista, sobre si James era el verdadero padre del príncipe Harry, Hewitt se puso visiblemente tenso. Después de todo, desde que se supo sobre la conexión entre la princesa y James (este romance fue públicamente reconocido incluso por la misma Diana), muchos aseguraron que Harry no era el hijo de la realeza, sino del oficial de caballería Hewitt. Además, la apariencia del príncipe, de hecho, es muy similar a la de James. En cualquier caso, Harry no es exactamente como Carlos, pero tampoco tiene mucho de Diana.
Sin embargo, durante la entrevista, Hewitt encontró la fuerza para decir: “No, no puedo ser el padre de Harry, ¡porque conocí a Diana solo en el año 1986!”. Ya que el hermano menor de William nació en 1984, es lógico que James no podría ser el padre de Harry.
Quizás todos le hubieran creído incondicionalmente a Hewitt si no habría un documental filmado hace un tiempo atrás. Este documental está dedicado a otra “entrevista” con James, quien aceptó, en forma de experimento, responder a diferentes preguntas bajo hipnosis. Y durante este discurso, Hewitt nombró una fecha muy diferente del comienzo de su romance con la princesa. Estando en un estado de profundo trance, es decir, cuando James no podía mentir, al responder cuando fue la primera vez que besó a Diana, Hewitt dijo: “En 1982 …” Y entonces sacando cuentas, James pudo haber sido el padre de Harry. Por supuesto, la prueba de paternidad finalmente podría aclarar este problema. Pero la corte real no permitió hacerla.
Esto llevó al hecho de que los medios británicos contrataron a un detective privado para obtener una muestra del cabello del hijo de la princesa Diana, Harry, informa CNN. De esta manera, los sensacionalistas tienen la intención de analizar el ADN del príncipe y establecer la identidad de su padre.
Un ex policía, cuyo nombre no se informa, dio la información sobre los planes de la publicación. Según los detalles, una mujer joven y atractiva debía encontrarse con Harry, a ella se le había dado la tarea de arrancar algunos pelos de la cabeza del príncipe.
Después de que se negara el parentesco de Hewitt, el nuevo retador para el papel del papá de Harry fue otro oficial que sirvió en el palacio: Mark Dyer.
El hecho de que Dyer realmente jugó un papel importante en la vida del Príncipe Harry, se conocía desde hace mucho tiempo. Después de la muerte de Diana, Mark dedicó mucho tiempo al pequeño Harry, quien a su vez incluso lo llamó “su segundo padre”. Es curioso que Dyer, después de dejar el servicio en el palacio, fuera invitado repetidamente a los eventos con la participación de miembros de la familia de la reina. Mark, a su vez, invitó a Harry a su propia boda. Sin embargo, Harry y Mark también mantuvieron comunicación fuera de los eventos oficiales.
Y en este momento, Dyer se encuentra en el punto de mira, por ser uno de los primeros en recibir una invitación para la próxima boda del príncipe con Meghan Markle. ¡Esta honra solo se le puede dar a una persona muy cercana! Después de eso, todos prestaron atención al hecho de que Harry se parece mucho más a Mark que a su padre oficial Carlos. Y pronto aparecieron testigos que estaban dispuestos a jurar que Dyer también había sido amante de la infeliz Lady Diana, quien se vio obligada a buscar consuelo en los brazos de otros hombres … Así que, teóricamente, pudo haber sido él el padre del príncipe pelirrojo.
Sea como sea, creemos que todas estas hipótesis son fabricadas por la imaginación de los periodistas. Y esta podríamos llamarla la confirmación. Un raro retrato del príncipe Felipe, esposo de Isabel II, de joven, descubierto no hace mucho en los medios franceses, es más elocuente que cualquier prueba de ADN, esto demuestra que Harry es el verdadero heredero del apellido Windsor Mountbatten. Y con la edad, esta similitud solo aumenta.
La foto extraña del duque de Edimburgo, de 36 años, apareció en la portada del French Paris Match, que se estrenó en 1957. Estábamos acostumbrados a ver al esposo de la reina Elizabeth II bien afeitado, pero hubo un momento en que Felipe Mountbatten llevaba barba y un bigote pelirrojo. Casi como el que ahora lleva su nieto Harry.