La inseguridad en uno mismo es uno de los sentimientos más importantes, ya que afecta de forma directa a nuestra imagen, la satisfacción con la vida y la estabilidad emocional. Pero algo que la caracteriza es que nos afecta a casi todos, de una manera u otra. Y tú seguramente te sorprenderías si supieras el número exacto de personas que luchan cada día en su fuero interno contra esto.
Según expertos en el área de la psicología estos son 9 síntomas típicos de inestabilidad emocional que, a menudo, se basan en una falta de autoconfianza. ¡No olvides la fórmula que te hemos preparado al final de este artículo!
9. Ansias de popularidad
En realidad, este deseo está presente en la mayoría de las personas. Pero todo fluctúa en la medida en que se carece de popularidad. Si tienes un verdadero amigo y un buen grupo de colegas, lo ideal es que te sientas cómodo sin preocuparte de que alguno de ellos tenga más éxito social.
Sin embargo, como estamos en el siglo XXI, Internet ocupa un primer plano. Muchas personas desean ser populares también en las redes sociales. Si buscando “Me gusta” de personas desconocidas estás dispuesto a hacer cualquier cosa, vale la pena detenerte a pensar en las razones de dicho deseo y hasta pedir ayuda a un especialista.
8. Dudas sobre tu propio atractivo
Te sorprendería, pero incluso las personas que tú consideras más bellas a menudo albergan dudas al respecto. Y eso es normal. Es imposible estar siempre 100 por ciento seguro de gozar de una imagen perfecta. Hay días malos, días en los que reina el mal humor y otros factores que pueden afectar a tu apariencia.
Trata de encontrar las ventajas que posee tu físico y haz hincapié en ellas. Esto aumentará tu nivel de autoconfianza.
7. Preocupación por la opinión de los demás
Si estás constantemente preocupado por lo que los demás piensan de ti, cómo reaccionan a tus acciones o palabras, relájate. Los demás están en la misma situación que tú, se preocupan por lo mismo: tienen miedo también a las reacciones negativas. Tu apariencia y comportamiento les interesa en menor medida.
Prueba preguntarle a tus compañeros de trabajo qué llevabas hace dos días. Lo más probable es que la mayoría de ellos no pueda contestar. Por lo tanto, renuncia a esas preocupaciones innecesarias y vive como te gustaría vivir.
6. Reacciones a un “no”
A nadie le gustan las negaciones y nadie quiere ser rechazado. Pero con frecuencia y en situaciones cotidianas, aunque una persona no quería ofendernos, sentimos exactamente un rechazo hacia nosotros o hacia nuestras ideas. Esto puede afectar de forma negativa a la autoconfianza. Especialmente si ya eres una persona poco segura de ti misma.
Pero piensa en que los demás también sufren por lo mismo. Tú mismo puedes ser esa persona que rechaza a alguien o sus ideas. Trata de percibir no solo tus propios sentimientos en tales situaciones, así te darás cuenta de que no estás solo.
5. Metas demasiado altas
Está bien cuando uno se propone un objetivo elevado y lo consigue. Así, aumentan las fuerzas y crece la confianza en uno mismo. Esto es lo que le permite avanzar más y alcanzar nuevas metas.
Pero esto no sucede de un momento a otro. El éxito es el resultado de un trabajo largo y duro, no esperes resultados inmediatos. De lo contrario, todo esto provocará fracaso y frustración. Esta es una causa por la que muchos abandonan una carrera demasiado rápido.
Trata de dar lo máximo, no te exijas a ti mismo ni a los demás lo imposible, no renuncies a aquello que ya has empezado a hacer.
4. Envidia
Muchas personas consideran a los demás mucho más felices que a ellos mismos. Una foto en las redes sociales acaba reafirmando este punto de vista. Pero, en realidad, no es así. La insatisfacción con la vida y con uno mismo es un fenómeno muy común que se produce en todo momento. Y las imágenes repletas de felicidad en Instagram son solo una cara más de la vida.
Mira a tu alrededor, muchas personas tienen exactamente los mismos problemas. Y probablemente alguientambién esté considerando que tu vida es perfecta y la suya no.
3. Infravaloración
La otra cara de la moneda consiste en que el sujeto está seguro de que nadie logra entenderlo. Que nadie es capaz de sentir lo mismo, ni preocuparse igual. Y esta característica está grabada a fuego en muchas personas.
Para cada uno de nosotros, nuestras penas son mucho más importantes que las que sufren los demás. Pero eso no significa que debamos rechazar a las personas que, de buena fe, intentan apoyarnos.
2. Apoyarse en exceso en la opinión ajena
Si durante un tiempo prolongado no puedes tomar una decisión, esto solo demuestra falta de autoconfianza. Probablemente, en este tipo de situaciones, requieres de la opinión de las personas que consideras importantes.
Si te piden un consejo, trata de no imponer un punto de vista, ayuda a los otros a entender qué es lo que quieren exactamente.
1. Apropiación de un ser querido
Si crees que tus seres queridos tienen que amarte de forma incondicional y estar dispuestos en cualquier momento a acudir a tu llamada, ve con cuidado: este camino no te llevará a ninguna parte. Cada persona tiene sus propios deseos y, claro está, pueden ser y serán distintos a los tuyos, incluso los de tu mamá. Y eso es normal, son personas, no sirvientes.
Así que la próxima vez que alguien se niegue a ayudarte con argumentos sólidos, en vez de ponerte a la defensiva, comienza a enfrentarte a tus problemas por tu cuenta.
Seguridad en ti mismo = tranquilidad emocional
Una cuestión es del todo cristalina: la inseguridad en uno mismo puede manifestarse, incluso en las cosas pequeñas. Pero justo de esos pequeños detalles se construyen nuestras vidas. Por lo tanto, tiene sentido que pruebes a cambiar algo en ti mismo para alcanzar con éxito tu paz emocional interior.
¿Te ha resultado familiar todo lo que te hemos contado? ¿Eres de esos que a menudo se sienten nerviosos por nada? ¡Comparte tus respuestas e impresiones en los comentarios!
Imágenes: Genial
Con información de: Brightside