Jamás comiences tu matrimonio con un mal vestido…
Cuando eres parte del mundo del espectáculo, la presión de verse bien, ser único y diferente, es bastante. No sólo se busca destacar, sino que también se debe llamar la atención. El problema es que este exceso de excentricismo en las celebridades, ha terminado por nublarles el juicio.
¡Que no te pase!
1. El rosa fuerte nunca será una buena idea. Y en caso de buscar marcar precedente, por último optar por algo más que el vestido entero en un color irritante. Te estamos mirando a ti, Jessica Biel.
2. Katie Price es la reina del mal gusto en los vestidos de novia
3. A estas alturas todos conocemos el gusto de Mama June, pero aún así logró sorprendernos con su vestido de novia con Sugar Daddy. Indescriptible.
4. Emma Thompson gana en originalidad, pero parece cualquier invitada a su boda y esa nunca es la idea.
5. Angelina Jolie quiso innovar con este vestido de Versace, que tenía dibujos de sus hijos bordados. El problema es que no pegaban ni por descuido.
6. Lady Mary Charteris decidió que el día de su boda, era el día para brillar, como si de cualquier performance se tratara
7. Britney Spears dio el sí con otro vestido, pero luego se lo cambió durante la fiesta. El que ven en la imagen es el segundo, que se convirtió en una pieza memorable, luego de que años más tarde -y ya separada del padre de sus hijos- lo usara en la calle.
Sé lo que intentó decirnos Britney con el segundo acto y la respeto mucho por eso.