Creemos que siempre utilizamos rutinas de higiene adecuadas, sin embargo hoy desvelaremos según la ciencia cuándo y por qué debemos de asear las cosas que más utilizamos con frecuencia incluído nuestro cuerpo, echa un vistazo:
1. Tienes que lavar tu toalla de baño luego de cada 3-4 usos.
Las toallas probablemente son las piezas más sucias de tu baño entero, sí, muchísimo más que el inodoro. Luego del primer uso van acumulando bacterias, células de piel muerta y todas tus secreciones. Por si esto fuera poco, los gérmenes que, por lo general, hay en un baño, encuentran en esta pieza un lugar húmedo, caliente y encantador en donde instalarse.
2. Las mujeres deben lavar los sostenes, como máximo, luego de seis veces de uso.
De hecho, después de tres veces que te hayas puesto un bra, es buen momento para lavarlo. Sin embargo, si crees que no has sudado tanto y puedes aguantar, luego de la sexta vez es hora de echarles agua y jabón.
3. Los jeans se deben lavar lo menos posible o, mejor aún, nunca.
Este es un tema algo controversial. Los especialistas recomiendan lavarlos lo menos posible. Otros, como el CEO de Levi’s, recomiendan no lavarlos jamás, de hecho, ven este acto como una pérdida de agua y un daño hacia la pieza. Algunos expertos te aconsejan meterlos en el congelador para eliminar las posibles bacterias y conservarlos en buena forma.
Aunque siempre puedes pasarles un pañito aquí y allá para mantenerlos sin manchas, hay otras recomendaciones que indican que, cuanto mucho, deberías lavarlos no más de una vez cada dos meses, esto si sudas mucho. De lo contrario, recomiendan hacerlo cada seis meses, si sientes que pueden aguantar.
4. Las sábanas las debes lavar, o por lo menos cambiar, semanalmente.
Tal vez no sepas cuánto polvo se esconde en tus sábanas, pues no solo es bastante sino que viene acompañado de bacterias que aman vivir en ese lugar calentito y húmedo encima de tu cama (sí, es húmedo por lo mucho que suda el ser humano cuando duerme).
Si prefieres dulces y LIMPIOS sueños, lo mejor es lavar la ropa de cama, con agua caliente, semanalmente. Sin embargo, si no tienes tiempo, puedes hacerlo cada dos semanas.
5. Se recomienda lavar la ropa de ejercicio luego de cada uso.
Sudas muchísimo cuando te ejercitas y, como generalmente estas piezas están pegadas a tu cuerpo, se llenan de bacterias que se quedan en la ropa y se multiplican al día siguiente. Esto sin sumar los olores que muchas veces tu nariz, por costumbre, no puede distinguir.
6. Las esponjas se deben cambiar semanalmente por una nueva.
De lo contrario, no estarás realmente limpiando tus utensilios de cocina cuando los pasas por ella, sino llenándolos de gérmenes que te pueden enfermar a ti y a tu familia. Así las exprimas, diariamente lo ideal es hervirlas en agua caliente y/o secarlas en el microondas, esto sumado a que cada semana debes contar con una nueva esponja en tu cocina.
7. Las toallas de manos deben lavarse cada dos días.
De acuerdo con microbiólogos, cada dos días es tiempo de cambiar la toallas de mano que tengas en casa. Sin embargo, si permites que se sequen por completo, tomen aire y luz natural, podrían aguantar un par de días más.
8. Las pijamas se deben lavar cada tres usos.
Y si te duchas antes de ponerte tu ropita de dormir, podrían durar hasta una semana. Si no las lavas con esta frecuencia, podría acarrearte problemas de salud como acné o hasta infecciones.
9. Si te pones un traje de baño, debes quitártelo y lavarlo por lo menos con agua.
No siempre tienes que lavar con jabón el traje de baño, pero sí es fundamental echarle mucha agua cuando te lo quites. Esta pieza está expuesta a sudor, bloqueador o bronceador solar, cloro y otros químicos, no lo guardes con todo esto.
10. No deberías lavar tu cabello con champú más de 2-3 veces a la semana.
Claro, el número de veces depende de si tienes algún producto en tu pelo o si es graso o seco. Sin embargo, echarte champú de dos a tres veces a la semana es el número perfecto para mantener una cabellera saludable.
11. Debes lavar tu cara dos veces al día.
Al despertar y antes de ir a dormir, estos son los dos momentos del día en los que te debes lavar la cara diariamente. Una tercera vez sería si haces ejercicio o sudas mucho, en esta ocasión también es importante lavarte la cara para eliminar impurezas.
12. Los pinceles de maquillaje que tienen contacto directo con tu rostro se recomienda lavarlos semanalmente.
Hablamos de los pinceles con los que aplicas la base o el rubor, pues estos, como tocan directamente tu cara, debes lavarlos semanalmente. Este hábito ayudará a evitar que desarrolles acné u otros problemas en la piel.
13. Por otro lado, los pínceles de ojos se deben lavar mensualmente.
Si se trata del pincel que solo tiene contacto con el párpado de tus ojos, es suficiente con lavarlo una vez al mes. Lo mismo aplica con los que se usan en las cejas.
14. La ropa interior debe lavarse cada vez que te la quites.
Sin excepción, hombres y mujeres: para evitar infecciones, la ropa interior debe usarse solo una vez y luego lavarse.
15. Tus abrigos deben lavarse una vez cada temporada.
Una temporada dura aproximadamente tres meses. Si solo usas tu abrigo durante invierno, esto quiere decir que lo normal es lavarlo una vez al año. Sin embargo, si lo usas mucho durante esa época y crees que estuvo en contacto con polvo y contaminación de forma constante, se recomienda también lavarlo en la mitad de la temporada.
16. Y una buena noticia para algunos, y mala para otros: lo ideal es bañarse cada 2-3 días… o cuando realmente estás sucio.
Si no estás sudado o sucio, no te bañes. Esta es la recomendación de cientos de doctores quienes afirman que bañarse muy seguido, sobre todo con agua caliente, causa daños a la piel como sequedad y la eliminación de batería buena y aceites corporales naturales que protegen la piel.
La ciencia te recomienda ducharte cuando sientas que realmente lo necesitas, o cada dos/tres días.