El niño de la versión original de Willy Wonka rechazó a Hollywood y tomó un rumbo inesperado ¡Han pasado casi 50 años!

Charlie se convirtió en adulto y luce muy diferente a ese tierno niño rubio que recordamos.

Durante años, pequeños y adultos han disfrutado de una entrañable y fantástica historia: Charlie y la fábrica de chocolates ha alimentado nuestros más recónditos sueños y el anhelo de ser ese niño que consigue un boleto dorado que cambia su vida para siempre, al convertirse en dueño de una increíble fabrica de todo tipo de dulces.

Varias generaciones alguna vez desearon ser Charlie, todos envidiamos su destino. Lo más jóvenes con la versión popularizada por Johnny Depp y lo más adultos, con la de los años 70’ con Gene Wilder.

En esa primera filmación, Peter Ostrum interpretaba a Charlie Bucket, el niño protagonista. Tenía solo 12 años cuando participó de la versión de Roald Dahl y su participación no fue algo fácil para él.

Pero tras el estreno de la película, el prometedor futuro cinematográfico del pequeño actor se desvaneció. Este fue el único papel que interpretó alguna vez. Al terminar el rodaje de la cinta sobre Willy Wonka, se negó a firmar un contrato de 3 películas venideras. En cambio, decidió comprar un caballo con el dinero que ganó.

De hecho, en el 2000 dijo a Journal of the American Veterinary Medical Association que: “Todos piensan que actuar es una profesión tan glamorosa, pero es una profesión difícil”. Cuando vio a un veterinario en acción, su vida dio un vuelco importante. “Alguien que se ganaba la vida con algo que disfrutaba tanto despertó mi interés”, confesó al respecto.

Tras terminar la secundaria, Peter asistió a Delaware Equine Center y luego obtuvo el título de veterinario en la Universidad de Cornell en 1984, a pesar de las ofertas de volver a Hollywood.

Ahora Peter dedica su tiempo a los animales, participa en charlas con los jóvenes sobre sus experiencias y lo que es ser un veterinario, así como la vida cambia con las decisiones que tomamos.

Y aún recuerda con cariño su paso por Charlie y la fábrica de chocolates. “En aquel entonces, cuando salió la película, no se estrenó la alfombra roja. Yo estaba en mi ciudad natal en Ohio y tenían una vacante allí y fui el único. Hubo un poco de fanfarria pero no mucho y la película murió en silencio. Tenía críticas tibias y la gente lo olvidó”, dijo a The Mirror en e 2013.

Por lo que el éxito posterior lo tomó por sorpresa. “No teníamos idea en ese momento de que tendría algún tipo de éxito, así que es bastante bueno que todavía sea tan querido”, añadió.