Nadie conoce la falta de privacidad como unos padres. Nada de ducharse en paz, ni de ir al retrete a solas. Clint Edwards, autor del blog sobre ser padres “No Idea What I’m Doing: A Daddy Blog,” compartió en Facebook una de sus experiencias en un retrete público que le ocurrió hace poco.
Este padre de 3 hijos se encontraba en un viaje familiar del que llevaban 2 horas, y de repente le dio un ataque de diarrea. Se encontraba con su hija de 4 años en una gasolinera, y tuvo que llevársela corriendo al retrete con él. Mientras Clint sufría, su hija le animó sin parar, gritando y aplaudiendo que “¡Ya lo consigues, papa!” Se le ocurrió después que el método en que él y su esposa habían enseñado a la niña a usar el retrete, con refuerzo positivo, le había dejado una gran impresión.
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