6 Reglas de la familia real que la princesa Diana cambió para siempre

La representante de una de las familias aristocráticas del Reino Unido, Diana Spencer, era la candidata perfecta para el papel de princesa. Muy rápidamente, logró eclipsar con sus acciones y comportamiento a todos los demás miembros de la familia real. La imagen de la princesa dejó de ser algo sublime e ideal, le mostró a la gente que no era una estrella de otra galaxia, sino que era igual que todos los demás.

Te contaremos cómo Lady Di rompió el protocolo real y cómo esto afectó a la familia real de Gran Bretaña.

1. Ella misma eligió su anillo de compromiso

Por lo general, la pareja real encarga los anillos de compromiso a joyeros eminentes, además, las reliquias familiares a menudo se usan como piedras principales. Por ejemplo, el anillo de bodas de Isabel II se hizo usando el diamante más puro, que fue tomado de la tiara de la Princesa Alicia, la madre del príncipe Felipe, el esposo de la reina.

La princesa Diana se apartó de la tradición y eligió el anillo que le gustaba por catálogo. Por supuesto, esta joya no era menos magnifica que otras joyas reales. Al mismo tiempo, Diana una vez comentó que este anillo no era el más caro. La joya fue heredada y ahora es el anillo de compromiso de la duquesa de Cambridge, esposa del príncipe William.

2. Se convirtió en la primera mujer de la familia real en dar a luz fuera del palacio

Durante muchos años, las mujeres de la familia real de Gran Bretaña dieron a luz en casa, donde se crearon todas las condiciones para el nacimiento de los bebés. Lo mismo hizo la reina Isabel II. Pero la Princesa Diana eligió dar a luz a ambos hijos en un hospital, de esta manera violando la tradición. La duquesa Catherine siguió el ejemplo de su suegra y también tuvo a todos sus tres bebés en el hospital, el mismo que la princesa Diana. Por cierto, ya dos veces, Kate ha salido del hospital en vestidos muy similares a los vestidos de Diana el día del alta: un gesto recordatorio tan lindo.

3. Diana tenía su propia opinión sobre la crianza de los hijos

Anteriormente, en la familia real no estaban acostumbrados a pasar mucho tiempo con los niños, y mucho menos viajar al exterior con ellos. Por ejemplo, cuando el príncipe Carlos tenía 2 años, fue dejado al cuidado de sus abuelos mientras sus padres, la reina Isabel II y el príncipe Felipe, fueron a Malta. La reina viajó mucho por el mundo y rara vez llevó a sus hijos con ella, y tampoco expresaba sentimientos hacia los niños en público.

La princesa Diana rechazó las formalidades y crio a sus hijos un poco diferente. No le gustaba dividir a la familia, por lo que los pequeños William y Harry viajaban con sus padres cuando tenían que desempeñar sus deberes reales en otros países. Cuando hablaba con los niños, Lady Di solía ponerse en cuclillas para verlos a los ojos. Ella no tenía miedo de mostrar cálidos sentimientos maternales en público y, una vez más, abrazar a sus hijos, a pesar del hecho de que tal comportamiento no era aceptado en la familia real. Otro punto interesante: anteriormente, los herederos al trono recibían educación en el hogar antes de la escuela. Por ejemplo, el príncipe Carlos, de los 5 a 8 años de edad aprendió con una institutriz. Diana hizo todo a su manera: William y Harry se convirtieron en los primeros herederos al trono en ir a un jardín de niños.

La princesa Diana intentó hacer que la infancia de sus hijos fuera normal: los acompañaba a las atracciones, les permitía usar jeans y camisetas y viajaba con ellos en transporte público. Cuando los niños crecieron un poco, ella los llevaba a refugios de animales y hospitales para mostrarles la vida fuera de los muros del palacio. Y los niños le respondieron con amor recíproco: dicen que la relación de los príncipes con su madre era mucho mejor que la relación con su padre, el príncipe Carlos.

Todas estas innovaciones en la crianza de los niños fueron adoptadas por el príncipe William: a pesar de su trabajo y viajes, pasa mucho tiempo sus hijos, y los niños a menudo viajan con sus padres. Sus hijos también asisten a un jardín de niños, y él mismo a menudo los lleva a clases. Por cierto, antes, la comunicación de los nietos portadores de la corona con sus abuelos de origen no real no era muy permitida: William cambió esta tradición y aprueba la comunicación de los más pequeños con los padres de su esposa, la duquesa Kate.

4. Diana era muy abierta con la gente, no como otras personas reales

El nombre de la princesa Diana está claramente asociado con la caridad. En la familia real, ella no era la única que visitaba hospitales y participaba del trabajo humanitario, pero la “reina de los corazones de la gente”, como la gente la llamó, lo hacía con la mayor apertura y sinceridad.

Ella abrazaba a las personas con VIH cuando todavía había un montón de temores acerca de la seguridad de un acto así, visitaba a los pacientes en lepra, luchó por la prohibición de las minas antipersonales y viajaba a los campos minados, ayudaba a las personas sin hogar y a los ancianos. Diana eclipsó rápidamente al príncipe Carlos; la gente la adoraba, se convirtió en un verdadero símbolo de la generación, un ícono. Por supuesto, ella tenía un verdadero don para la compasión: nunca las personas reales habían sido tan cercanas, tan comprensibles para los simples mortales.

Por cierto, en cuanto a los abrazos: de acuerdo con el protocolo, los miembros de la familia real no pueden ser tocados. La princesa Diana muchas veces violó esta regla y, por ejemplo, a menudo abrazaba a niños y enfermos. El príncipe William y el príncipe Harry no solo continúan el trabajo de su madre y dedican una enorme cantidad de su tiempo a la caridad, sino que también a menudo violan esta regla del protocolo real, Catherine, William y Harry a cada rato abrazan a los niños y pacientes de las clínicas, incluso aceptan sacarse selfies con ellos.

5. Ella no tenía miedo de mostrar sus sentimientos

La prensa literalmente persiguió a la princesa Diana: los paparazzi filmaron cada paso, cada gesto de ella. A pesar de esto, Lady Di siempre fue muy franca con los periodistas, a veces incluso demasiado: en 1995, ella, en secreto, dio una entrevista donde admitió tener problemas con su marido. Poco después, se divorciaron: por desgracia, esta unión no podría llamarse feliz. La princesa Diana no dudó en hablar sobre sus problemas o, por el contrario, compartir su alegría y sus emociones, que antes era totalmente inconsistente con el comportamiento de los miembros de la familia real. Tal vez, fue por esta transparencia y sinceridad que la gente común se enamoró de ella.

Afortunadamente, la vida familiar de los hijos de la princesa Diana es más feliz. Sin embargo, los príncipes, al igual que su madre, tratan de ser honestos y con mucho gusto hablan de los acontecimientos de su vida: William y Catherine publican fotos de sus hijos al Instagram oficial, dan entrevistas. Y Meghan Markle, mientras todavía era la novia del príncipe Harry, fue la primera novia en compartir detalles de su romance con la prensa antes de que fuera confirmado por el Palacio de Kensington. Tal vez, en nuestra era digital, no puede ser de otra manera, pero ¿quién sabe si aceptarían tal sinceridad, si no fuera por la princesa Diana?

6. Diana experimentó con estilos

A pesar del código de vestimenta relativamente estricto, válido para eventos formales (que ella a menudo violaba), la princesa siempre pudo verse elegante, y de moda, y simplemente hermosa. Ella no tenía miedo de experimentar: por ejemplo, una vez se puso un collar como una tiara. Lady Di se convirtió en la primera mujer de la familia real en ponerse pantalones para un evento (ahora, Meghan Markle sigue su ejemplo, ya que ama los trajes de pantalón). Diana amaba el negro y a menudo elegía atuendos de este color, a pesar del hecho de que la familia real se viste de negro solamente en los funerales y al estar de luto. En pocas palabras, la princesa Diana se convirtió en una verdadera revolucionaria de la moda en el palacio, y con razón: además del título real, Diana llevaba el título de ícono de la moda.

Por cierto, Meghan Markle no se limita solamente a trajes pantalón: parece que los requisitos para sus atuendos no son tan estrictos como los de la imagen de Catherine, que es la madre de los herederos. Por ejemplo, en un evento oficial reciente, Meghan apareció con un vestido con los hombros abiertos, mientras que el protocolo recomienda cubrirlos con mangas. Nos preguntamos si podrá convertirse en un nuevo ícono de la moda real. ¿Qué piensas?

¿Cómo afectaron la monarquía estas acciones?

La princesa Diana, sin saberlo, influyó bastante en la monarquía. “Sigo el llamado de mi corazón, no de la cabeza, a pesar de que me trae problemas. Pero alguien tiene que estar más cerca de la gente, amarla y demostrarlo”, decía ella. La reina y sus allegados aprendieron una lección importante: la existencia de la monarquía depende por completo de la opinión pública de los habitantes del Reino Unido.

La familia real se ha vuelto más abierta: hace unos 20 años, difícilmente podría haberse imaginado que la reina saltaría desde un helicóptero con James Bond para la apertura de los Juegos Olímpicos en Londres. Las celebraciones solemnes hace mucho no se organizan solo por invitación: sino que se hacen justo en frente del palacio, donde puede reunirse la mitad de la población de Londres.

Las violaciones al protocolo de Diana se han convertido en el punto de partida de la nueva política de la familia real que tuvo que cambiarse, hacerse más fácil y sencilla. La princesa mostró al mundo que la familia real no era un conjunto de esnobs conservadores, sino personas comunes, con sus penas y alegrías.