Hoy en día cada vez más personas prefieren pagar con tarjeta, pero los delincuentes que practican fraudes con tarjetas bancarias también están más activos que nunca. Sin embargo, los titulares de tarjetas también son bastante cautelosos cuando realizan transacciones. La mayoría de las personas saben al dedillo las reglas básicas del comportamiento financiero: ocultar el PIN, no revelar el CVV a nadie, inspeccionar el cajero automático antes de usarlo. Sin embargo, los estafadores inventan trucos nuevos y, en estas condiciones, necesitas conocer métodos mucho más sofisticados para guardar tu dinero que las medidas de seguridad habituales.
Encontramos varias reglas no obvias para el manejo de tarjetas y cuentas bancarias que ayudarán a proteger los ahorros incluso de los estafadores más avanzados.
Durante las manipulaciones con el cajero automático
- El consejo de cubrir el teclado con la palma de la mano todavía es relevante. Pero para mayor seguridad al ingresar números, toca con tus dedos no 4, sino 6–7 teclas, presionando realmente las teclas necesarias y fingiendo presionar las otras. De esta manera, será más difícil para un delincuente identificar un código PIN, incluso si registra tus acciones con una cámara.
- Ten cuidado con cualquier “ayudante” en el cajero automático. Un estafador puede manipular de antemano el lector de tarjetas para evitar la extracción de la tarjeta. Y luego le recomendará al propietario que “resuelva el problema” ingresando un código PIN. Cuando el dueño, tras perder la esperanza, se va al banco, el estafador recuperará la tarjeta y la vaciará con la ayuda del código PIN averiguado de esta manera.
- Trata de usar los cajeros automáticos ubicados en las oficinas bancarias. Están bajo vigilancia las 24 horas del día, es extremadamente difícil instalar dispositivos para robar fondos o información de la tarjeta.
En la tienda
- No saques la tarjeta con anticipación (por ejemplo, en una cola para pagar) y no la tengas en la mano por mucho tiempo. Un estafador con el pretexto de estar entusiasmado con su teléfono inteligente puede en un par de segundos fotografiar ambos lados de la tarjeta e incluso copiar los datos de la banda magnética.
- Cubre el código CVV con algo (sirven tanto una etiqueta adhesiva como una cinta adhesiva de colores u opaca) para que nadie pueda verlo.
- El código CVV incluso puede ser borrado completamente de la tarjeta para maximizar las dificultados para su uso en caso de robo o pérdida. A veces, esto puede traer unos problemas (pueden no aceptar la tarjeta, especialmente en algunos países), pero para aquellos que no están utilizando activamente el soporte físico, el consejo puede ser útil.
- Utiliza fundas y billeteras apantalladas especiales para guardar tarjetas bancarias para evitar la lectura remota no autorizada de datos de la tarjeta.
Home-banking y transacciones online
- No ingreses al home-banking desde las computadoras de otras personas o redes desprotegidas. Si no hay otra opción, al final de la sesión, no olvides cerrar sesión y borrar la memoria caché.
- Al realizar pagos, siempre lee atentamente la dirección en la barra del navegador: la más mínima discrepancia con el dominio del banco casi siempre significa que te encuentras en un sitio web de phishing (fraudulento).
- Comprueba el certificado de seguridad del recurso que se está utilizando: si hay uno, el icono de candado aparece en la barra de direcciones y la línea en sí está resaltada en verde. Al hacer clic en el candado, verás quién recibió el certificado.
- Cuando compras en línea, otorga preferencia a los sitios comprobados, porque hoy en día es más fácil para los estafadores crear su propia tienda en línea completamente real que hackear el sistema de pago de alguna otra. Ten cuidado si van a enviar los bienes solo con pago previo, y entre las opciones de pago solo se ofrecen pagos online.
- Instala y actualiza a tiempo el antivirus en tu computadora. Usa las versiones modernas del navegador y los programas de correo y cambia regularmente las contraseñas (una vez cada 3 meses sería lo ideal), usando para ellos combinaciones de números y letras de diferentes registros.
Al cambiar la configuración de cuenta y tarjeta
- Establece límites razonables para las transacciones de pago para que las compras importantes no se puedan realizar al toque, sin ingresar un código PIN.
- Las operaciones CNP (card not present), es decir, las transacciones en Internet, es mejor deshabilitarlas por completo y activarlas brevemente cada vez que se realicen pagos.
- Alternativamente, para compras en línea, puedes solicitar una tarjeta virtual especial y transferirle los montos requeridos para una compra en particular. Por lo tanto, la mayor parte de los fondos permanecerán seguros si, en el momento de la transacción, los estafadores obtienen acceso a la tarjeta.
- No rechaces las notificaciones por SMS: confirmación del inicio de sesión, contraseñas para cada operación y notificaciones al recibir y retirar fondos. Incluso si te roban la tarjeta, para los estafadores será imposible ingresar al home-banking sin un SMS con una contraseña. E incluso si lograran hacerlo, inmediatamente te enterarás del primer gasto y tendrás tiempo para bloquear rápidamente la tarjeta.
- Los riesgos también incluyen el doble pago. Dado que las tarjetas modernas simplifican y acortan enormemente el procedimiento de pago, los vendedores sin escrúpulos (o simplemente inexpertos) pueden hacerte pagar un artículo dos veces. También puedes verificar ese momento utilizando el informe por SMS.
Al comunicarse con el banco y las compañías de telefonía móvil
- En los últimos tiempos, debido al aumento de las medidas de seguridad técnica, los estafadores apuestan cada vez más a la comunicación personal, intentando extraer información del titular de la tarjeta por teléfono. Este fenómeno, cercano al phishing, ha recibido un nombre similar: “vishing” (vishing, de voice phishing).Su esencia es que los delincuentes con diversos pretextos (cheque bancario, sondeo de opinión, respuesta a un anuncio, entrega de bienes, etc.) intentan obtener información sobre la tarjeta de crédito y un código secreto durante una conversación telefónica. No te dejas engañar: ¡no se resuelven las preguntas de la esfera de las finanzas por teléfono!
- Dado que el teléfono también se usa para una serie de transacciones con tarjeta, se debe tener especial cuidado con él. En particular, asegúrate de que el chip involucrado esté hecho a tu nombre y no pueda ser reemplazado para que los estafadores no puedan registrarlo a su nombre o hacer un duplicado para interceptar los SMS del banco.
- Algunos bancos ofrecen la emisión de tarjetas de plástico con una foto del propietario; no descuides esta oportunidad. Y luego los estafadores perderán al menos una forma de gastar tu dinero (pagar con una tarjeta robada en la tienda).
Por supuesto, nuestra tarea es actuar de manera proactiva, pero en caso de que los delincuentes demuestren ser más astutos, hay un consejo general más: controlar regularmente el estado de tu cuenta. Esto te permitirá notar cualquier transacción sospechosa a tiempo y reaccionar rápidamente ante el fraude.
¿Y qué formas de proteger el dinero en tu tarjeta practicas tú?