La muñeca viviente que se pasea por las calles de Tokio: su aspecto asusta (+Fotos)

Lulu Hashimoto es un nuevo invento de los japoneses. Ella es una muñeca viviente cuya apariencia asusta y fascina a los residentes de Tokio. Esta imagen de anime la ha creado una joven de 23 años de edad, Hitomi Komaki. Y le resultó muy bien, porque Lula ya es muy popular.

Se sabe que Lulu Hashimoto fue seleccionada como una de las 134 finalistas entre 4000 candidatos en un concurso de belleza Miss ID, en los cuales se presentaron seres que no tienen relación con las personas, sino que fueron creados con la ayuda del uso de inteligencia artificial y gráficos de computadora.

La chica se pone una máscara especial, peluca, medias y guantes con adornos en forma de unos títeres y de esta forma sale a la calle. La reacción de los transeúntes es ambigua: algunos se alarman, otros la admiran. Pero todos muestran interés. La cultura oriental siente una atracción inherente a las muñecas.

Esta Barbie japonesa ya tiene un ejército de fans y seguidores en Twitter e Instagram. Y a juzgar por la fama que tiene, se puede esperar que pronto aparezca otra.

Hitomi Komaki crea muñecas desde los últimos 9 años. Sin embargo, es la primera vez que crea una máscara de muñeca realista para una persona, la cual se puede poner como si fuera una segunda piel. Y con mucho éxito.

Las medias para Lulú las crea el diseñador Koch Yueno, que tiene una pasión por la pintura de elementos para muñecas en patimedias. “Quiero que las mujeres lleven este tipo de medias y se transformen. Quiero que experimenten algo extraordinario, que se sientan como seres de otro mundo, como muñecas artificiales”, -dice él.

Lulu se presentó por primera vez delante de la comunidad mundial en julio del 2016 en el distrito de Harajuku en Tokio, un lugar icónico donde se reúnen cosplayers y fashionistas de todo el país.

Ahora la muñeca viviente Lulu Hashimoto conduce su propio programa llamado Luluroom y está haciendo una carrera de modelo.

Y Hitomi Komaki no pierde la esperanza de recibir no sólo fama y beneficio comercial por su creación: sino también patentar la marca, para organizar la colaboración con las casas de moda, ejecutar una línea de modelos como muñecas y grabar videos con su participación. “Alguien considera a mi proyecto un fetiche. No creo que sea un fetiche, para mí es la moda”,- dice el diseñador.

Vamos a ver si la nueva moda crea una nueva tendencia de carácter masivo.

¿Y qué piensas sobre esto? ¿Crees que vale la pena esconder la cara tras una máscara de anime incluso si es muy bonita?