¿Alguna vez no has sentido que la vida simplemente no marcha como debería? ¿Sientes que no alcanzas ninguno de tus objetivos? ¿Crees que estás estancado? Entonces es probable que estés haciendo algo mal sin que te des cuenta, pero descuida, estamos aquí para compartirte un pequeño fragmento de sabiduría.
Por lo general, nos gusta compartir todas nuestras ideas, pensamientos y opiniones, incluso cuando no es necesario, es solo un hábito que tenemos para “desahogarnos”. Sin embargo, de acuerdo a una antigua tradición hindú, existen muchas cosas que no debemos compartir ni divulgar sobre nuestras vidas para que la vida empiece a marchar de mejor manera…
¡Aquí te enseñamos cuáles son esas cosas!
Todos conozcan a Vyacheslav Ruzov
Un investigador de culturas orientales que recientemente escribió un artículo sobre las costumbres de los sabios de la India. En su artículo, Ruzov habla sobre lo que es el misterio en la India y de lo que jamás se debe difundir en público. ¡Aquí te revelamos cuáles son las cosas que jamás debes revelar!
1. No compartas el misterio de tu caridad
Los actos buenos y nobles son cosas más extraordinarias del mundo y es precisamente por eso que debes guardarlo como un tesoro valioso. Después de todo, no ganarás nada con mostrárselo a los demás.
Tampoco te alabes por tus buenas obras o las presumas
Esto solo te convertirá en una persona arrogante y esa no es una característica de la que puedas sentirte orgulloso. Además, al hacer un acto noble para presumirlo deja de ser noble, sino que es interesado.
2. No hables sobre cosas feas que escuchaste en el día
Las palabras feas pueden manchar tu conciencia una vez que las repites, además que estarías incitando a manchar las conciencia de todos aquellos que te escuchan.
Te lo explicaremos a través de una analogía:
Escuchar palabras feas es como manchar tus botas en la calle. Esa persona que llega a su casa a repetir todo lo que escucho no es muy diferente a la persona que llega a su casa y no se quita sus botas sucias.
3. No difundas tus planes a futuro
Evita en lo posible hablar de ellos hasta que no los tengas bien encaminado o los hayas hecho realidad. Es por tu propio bien.
Ninguna de nuestras ideas son perfectas, de hecho tienen muchas debilidades
Por lo que al compartirlas, las volvemos en blancos fáciles para golpearlas y destruirlas.
4. No es necesario que divulgues tu conocimiento espiritual
Eso es solo para ti y no hay necesidad de compartirlo con alguien más, puede que no compartan tus creencias.
Solo revélalo en casos de que sea necesario para esclarecer a alguien más, jamás para presumir tu razón
5. No hay que demostrarle a todo el mundo tu austeridad
No es necesario que comentes tus limitaciones de alimentación, relaciones sexuales, sueño, entre otros. ¡No ganas nada!
Además, la austeridad física solo te proporcionará beneficio si está en armonía con tu parte emocional
6. Jamás compartas tus conflictos familiares
Mientras menos divulgues los problemas de tu familia, más fuerte y estable será. Si deseas resolverlos, hazlo con tu propia familia.
Además, mientras más hables de esos problemas con otros, más graves se volverán para ti
7. Calla sobre tu valentía y heroísmo
Debes tener en cuenta que todas las personas enfrentan diferentes tipos de pruebas en su vida, algunas son pruebas internas mientras que otras externas.
Las externas son aquellas que se ven y generalmente son recompensadas al superarlas
Mientras que las internas no se ven, por lo que jamás son recompensadas. Independientemente de cuál haya sido la prueba que hayas superado, no hay necesidad de presumir. ¡La recompensa está en tu trabajo!