En el mundo del cine existe una noción llamada high concept (alto concepto). Son unas ideas de películas tan fuertes que, independientemente de la publicidad y el presupuesto, obligan a los espectadores a hacer fila para el estreno. Pero no todas esas películas finalmente cumplen con las expectativas que han generado.
Hemos reunido 10 películas cuyos guionistas han arruinado ideas absolutamente brillantes. Con cada una de estas historias se podían haber hecho películas de vanguardia, pero sus autores lograron que casi todas fueran premiadas con la Golden Raspberry (un premio otorgado a las peores películas del año).
De “Pequeña gran vida” esperaban una bomba de ciencia ficción
Qué se esperaba: una obra de ciencia ficción de buena calidad sobre una inesperada solución al problema de la sobrepoblación del planeta: una tecnología para reducir personas. Cualquiera que aceptara someterse al procedimiento recibiría un montón de bonificaciones, como una suma multimillonaria y viviendas lujosas en una metrópolis en miniatura. El personaje principal y su esposa tardan mucho tiempo en tomar la decisión. Pero al despertar después de la reducción irreversible, el protagonista se entera de que su amada se negó a realizarse el procedimiento en el último minuto…
Qué se obtuvo: una buena introducción en la que todo era tan perfecto como en el trailer. Y luego, un completo colapso: o los guionistas fueron reemplazados, o solo se les ocurrió una idea de base interesante, y simplemente no supieron cómo sostenerla. A partir del segundo acto, la historia parece convertirse en un interactivo masivo cuyos espectadores han elegido las acciones de los personajes más inesperadas y absurdas. Porque sí, por pura diversión, para ver qué pasa.
Una idea con tanto potencial podía haber derivado en distintos desarrollos: desde la tragedia de una persona, en todos los sentidos, pequeña, hasta una cruel distopía. Pero lo que se nos mostró es difícil de encajar en el marco de alguna clase de género, y ni siquiera la estrella de las películas de Tarantino, Christoph Waltz, en el papel del vecino gracioso, salva la situación.
Se esperaba que “El precio del mañana” fuera la mayor distopía de la modernidad
Qué se esperaba: una distopía ideológica sobre un futuro alternativo, donde el tiempo reemplazó completamente al dinero como unidad de pago. Una persona deja de envejecer a la edad de 25 años, y se le da otro año de vida. Si no repone/gana/roba/pide prestado más tiempo, se produce la muerte.
Y todo esto proviene del guionista de las mejores películas antisistema: The Truman Show y Gattaca; y del famoso director de fotografía de Blade Runner. Todo un combo.
Qué se obtuvo: “¿4 minutos por una taza de café? ¡Ayer eran 3!”. En este momento, cuando el concepto del mundo presentado se le revela al espectador, todo es genial. Pero, desafortunadamente, la descripción de las características de este universo no va mucho más allá de los detalles como una taza de café y los sistemas salariales. Es completamente incomprensible lo que hace la gente antes de cumplir 25 años (¿por qué no ahorran?), por qué puedes quitarle tiempo a la primera persona que te cruces y por qué, en tal caso, nadie lo protege. Por estas preguntas básicas poco trabajadas, todas las aventuras subsiguientes de los protagonistas parecen ser una inútil pérdida de tiempo en todos los sentidos.
Se suponía que el “Escuadrón Suicida” se convertiría en una pandilla más genial que todo el equipo de Marvel junto
Qué se esperaba: un ensordecedor disparo del universo DC: los supervillanos condenados a muerte van a salvar el mundo. ¡Es un high concept en su mejor expresión!
Qué se obtuvo: la abundancia de los personajes sobre los que, en realidad, no se cuenta nada, reduce toda la trama a un banal tiroteo, sin ningún giro en la historia ni profundidad en el tratamiento psicológico, como en el “Batman” de Nolan. Esto hace que sea imposible empatizar con los personajes, y algunos de ellos hasta te hacen preguntarte: ¿para qué están allí? Por ejemplo, el Capitán Boomerang, además de los periódicos intentos de imitar a Tom Hardy, no hace avanzar la historia de ninguna manera.
“Bajo Anestesia” debía sumir al público en estado de shock
Qué se esperaba: “Cada año, más de 21 millones de personas reciben anestesia general. La mayoría de ellas se quedan dormidas y no recuerdan nada. Pero unos 30 mil de estos pacientes tienen mucha menos suerte: no pueden ’apagarse’, y quedan atrapados en un fenómeno que se conoce como despertar intraoperatorio. Sus víctimas están completamente inmovilizadas. No pueden gritar y pedir ayuda. No están dormidas y son conscientes de todo lo que está pasando…”. Con estas palabras prometedoras comienza la película ’Bajo Anestesia’”. Te pone la piel de gallina.
Qué se obtuvo: Un ingenuo y tierno comienzo sobre un millonario, altruista y guapo hombre con un corazón débil. En el medio de la película se muestra durante aproximadamente 3 minutos su despertar intraoperatorio, y luego comienza una telenovela o una historia de detectives con su novia como protagonista. En resumen, la idea no se aprovecha, el guión es débil, Hayden Christensen y Jessica Alba actúan mal. La película apenas logra salvarse por el hecho de que ambos son increíblemente bellos.
El universo de la “Torre Oscura” se comparaba con el de “Juego de Tronos”
Qué se esperaba: una adaptación cinematográfica del western de ciencia ficción de Stephen King, a cuyo universo se le pronosticaba una larga vida y un lugar junto a “El señor de los anillos” y “Juego de tronos”.
Qué se obtuvo: al día siguiente del estreno, en los medios aparecieron las críticas al estilo de: “Se olvidaron de mostrar la mitad de la película, pero fue para mejor: al menos así terminó más rápido”. Y ciertamente, no se pudo incluir en 1 hora y media (¿has visto grandes éxitos de taquilla modernos tan cortos?) la rica textura y el simbolismo de la saga de King, dejando expuestos solo los eventos en crudo. Además, toda la acción se comprimió en la última media hora de la película, y el final no explicó nada: nunca nos enteramos qué era el mal, el bien y la torre. Si los autores hubieran cambiado al menos los últimos 30 segundos de la película y hubiesen narrarado, como en el libro, la explicación (el tirador perdió la memoria y regresó al principio de la película), todo habría subido a un nivel superior.
De “Aliados” se esperaba una versión intelectual de “Sr. y Sra. Smith”
Qué se esperaba: un drama de espías del nivel de la fusión de “Sr. y Sra. Smith” y la famosa “Casablanca”. Los personajes principales, unos agentes secretos, se enamoran en una misión, se casan, comienzan una vida nueva y tranquila, pero luego el cónyuge descubre que, probablemente, su nueva esposa no sea lo que dice ser. Sus superiores le dan 72 horas para demostrar la culpabilidad de su esposa y luego liquidarla. ¡Guau!
Además, la película fue realizada por el autor de películas como “Volver al futuro”, “Náufrago” y “Forrest Gump”.
Qué se obtuvo: los creadores recibieron una nominación al Oscar por el mejor vestuario… El vestuario realmente era bueno, al igual que Brad Pitt y Marion Cotillard en la interpretación de los personajes principales. Pero la película en sí se convirtió repentinamente en un melodrama absurdo con un montón de fallas en la lógica de los personajes, y una gran cantidad de escenas poco realistas. Los críticos estuvieron de acuerdo en que, al parecer, los autores supusieron que viendo el desenlace, los espectadores no debían sentir nada más que compasión, y no estarían pensando en tonterías como la lógica.
“El destino de Júpiter” fue imaginada como una mezcla de buena calidad de “Matrix” y “Star Wars”
Qué se esperaba: un fantasy de calidad de los autores de “Matrix”. La idea remite claramente a la creatividad del dúo Wachowski: la población de nuestro planeta sirve solo como materia prima para representantes de mayor estatus de razas alienígenas. El personaje principal, una mujer de Chicago que trabaja como empleada de limpieza, de repente descubre que su ADN coincide con los genes de la dueña de la mitad del universo. ¡Pero si es la historia del sueño americano al cuadrado!
Entre las bonificaciones de la cinta, se puede incluir el elenco, porque la película cuenta con la verdadera vanguardia de Hollywood: Mila Kunis, Channing Tatum y Eddie Redmayne. Y este último, como se sabe, no elige películas malas.
Qué se obtuvo: una variación cósmica de “Crepúsculo”. Eddie Redmayne recibió la Golden Raspberry y el dúo Wachowski, una nominación al peor guión del año. Muchos creen que una narración tan melosa fue un cambio lógico en la creatividad de los directores, después del cambio de sexo de uno de ellos. Pero probablemente el problema sea otro: los autores le dedicaron una gran cantidad de tiempo a trabajar en el concepto de su universo (quizás para crear una franquicia completa), pero no pudieron conectar todos estos detalles con una buena historia. Es por eso que la película resultó ser un conjunto de un montón de coloridos trazos que se mezclaron confusamente, dejando, después de la proyección, la misma confusión en la cabeza de los espectadores.
“Batman vs. Superman” tenía que convertirse en la tarjeta de presentación de DC
Qué se esperaba: la repentina enemistad y lucha de dos personajes justicieros, Superman y Batman, genera una intriga que puede atraer incluso a las personas que nunca han escuchado nada sobre los universos Marvel y DC. Además, el “productor ejecutivo: Christopher Nolan” en la descripción de la película despejaba cualquier duda acerca de la calidad de este experimento.
Qué se obtuvo: un Batman que por alguna razón siente aversión por el hombre de traje de látex azul y rojo, un aburrido y débil villano Superman, una batalla poco impresionante, varias líneas de trama apenas unidas y un montón de acciones completamente ilógicas e inexplicables de los héroes. Lo único bueno aquí fue la Mujer Maravilla.
De “Ocean’s 8: las estafadoras” se esperaba la continuación de la divertida franquicia
Qué se esperaba: la continuación de la trilogía de lujo de Steven Soderbergh sobre la hermana del mismísimo Ocean, que al salir de la prisión inmediatamente armó un equipo de las mejores estafadoras. Tienen que robar un collar, y no de cualquier lado, sino de la Gala del Met (el evento secular más importante de los EE. UU.). Inmediatamente queda claro que habrá elegancia y brillo.
Qué se obtuvo: una versión femenina de la clásica franquicia criminal con un montón de clichés y estereotipos, unas actrices famosas interpretando roles excesivamente caricaturescos, unos personajes completamente desmotivados que participan del robo “porque sí”, un montón de escenas innecesarias y, sí, elegancia y brillo con todo tipo de “cosas de mujeres”. Si la película no hubiera sido presentada como el legado de la historia de Danny Ocean, hubiese sido mucho mejor. Pero siendo su continuación, verdaderamente da lástima.
“Matrix recargado” y “Matrix revoluciones” iban a hacer una revolución cinematográfica
Qué se esperaba: la continuación de la trilogía ciberpunk de culto “Matrix”, en la que un oficinista común descubre que todo nuestro mundo es una ilusión, y que las personas son solo una fuente de alimento para la inteligencia artificial que ha esclavizado a la humanidad. Pero hay una posibilidad de salvarlo todo.
El mundo entero estuvo esperando la continuación durante 4 años, y hubo 2 estrenos casi simultáneos: “Matrix recargado” y “Matrix revoluciones”.
Qué se obtuvo: 2 películas que simplemente parasitaron la perfección de la primera parte, no se puede decirlo de ninguna otra manera. En las secuelas, el subtexto se va hacia algún lugar del tercer plano, y la acción recuerda más bien a una película de acción cualquiera, porque al espectador ya no lo asombra la irrealidad de lo que sucede. Todo termina de la misma manera pobre: los representantes de los sobrevivientes de la humanidad no derrotan a las máquinas, pero las partes llegan a un acuerdo para su coexistencia: las personas se alegran de haber sobrevivido y la inteligencia artificial continúa alimentándose de la energía de los prisioneros de la Matrix. Surge una pregunta lógica: ¿cuál sería el cambio que se ha logrado?
Hay una leyenda que dice que, según el guión de los hermanos (en ese entonces aún hermanos) Wachowski, Sion también tenía que ser parte de la Matrix. Suena cruel. Cruel, pero genial. Aunque los productores no compartieron esta opinión y los obligaron a cambiar el final para lograr el éxito comercial. Quizás esta haya sido una decisión equivocada.
¿Recuerdas alguna otra película que, en tu opinión, no justificó la expectativas que había generado, o que arruinó una gran idea inicial?