Un suéter que aparenta ser dos diferentes; convertir un pastel en sushi y el techo de una casa, en una obra de arte, nada es imposible para los protagonistas de la selección de fotos de hoy. Para ellos, no existe nada que no se pueda transformar en algo ideal o, al menos, modernizarlo.
Esta colección se puede emplear como una prueba de lo que significa el perfeccionismo. Así, las señales de dicho perfeccionismo son evidentes cuando…
…tratas de mejorar incluso lo que no necesita ser mejorado
Cuando decidiste convertir el techo en una obra de arte
Cuando quieres ver mejor bajo el agua y “tuneas” tu máscara con la ayuda de lentes ópticas
Cuando sabes hacer que coincidan las expectativas con la realidad
Cuando tu imaginación es tan genial que puede convertir un árbol de Navidad en un objeto de arte
Cuando no vas por adornos a una joyería, sino que los haces con tus propias manos a partir de una moneda
Cuando en vez de una selfie pintas un autorretrato
Cuando tu tarta de cereza se ve así
Cuando tu castillo de arena puede ganar un concurso de arquitectura
Cuando haces todo lo posible para que los pasajeros estén cómodos
Cuando en todo lo que te rodea ves una vía para la autoexpresión
Cuando la cocina de tu casa parece un museo del perfeccionismo
Cuando sabes cómo aportar al interior un toque diferente y “cool”
Cuando tu casa no puede confundirse con ninguna otra
Cuando tu habilidad para servir bebidas es digna de envidia incluso por un barman con experiencia
Cuando entiendes lo que significa tunear autos
Cuando eres tu propia diseñadora
Cuando tu letra es perfecta
Cuando cenaste mejillones y dejaste así el plato
Cuando haces algo con tus propias manos que provoca admiración
Cuando tienes un “cinturón negro” pelando granadas
Cuando puedes convertir una piedra en un elemento de decoración
Cuando preparar un pastel te parece una tarea demasiado simple y decides complicarla
Cuando rompes estereotipos y, en vez de una puerta recta, haces una redonda
¿Te consideras un perfeccionista?