Siempre y cuando sean felices y haya sido su decisión.
Quien se dispone y prepara para ser padre no sabe lo que le espera hasta que tiene literalmente en sus brazos a su hijo/a recién nacido. La vida cambia drásticamente y por completo, por mucho que no quieran asumirlo en un principio. Las noches se sienten eternas, no por salir de fiesta, sino que por tener que bañar a los niños, darles de comer e intentar lograr que se queden dormidos la noche entera. Además, olvídense del glamour, porque una vez que la vida de otro ser humano depende de ustedes, no habrá ni tiempo para bañarse o peinarse.
Pero no todo es malo: al final del día, son parte de la familia y un motivo de alegría para los nuevos padres, quienes verán crecer algo que ellos mismos crearon.
La cuenta en Instagram “Got Toddlered” ha compartido este proceso y no es nada menos que muy divertido. En sus fotos, el antes y después de estos padres primerizos quizás les haga cuestionarse su decisión. Al menos por un tiempo.