Desde tiempos inmemorables el pan forma parte integrante de la alimentación humana. Últimamente, las dietas sin carbohidratos se han puesto de moda y el rechazo a la harina se considera un paso importante hacia el estilo de vida saludable. Miles de blogueros suelen compartir sus historias sobre lo que ha cambiado en sus vidas desde que abandonaron los productos de harina. Sus resultados son sorprendentes: mejora la condición de la piel, logran bajar de peso, están llenos de energía. ¿Pero es verdad todo lo que dicen?

Decidimos aclarar la situación y estamos dispuestos a compartir nuestra propia recopilación de datos sobre el tema “¿Qué tipo de pan es más saludable?”. Así que… saca tus propias conclusiones.

Pan blanco vs. Pan integral

No tenemos nada en contra del pan integral, ni tampoco en contra del pan de centeno, avena o salvado. Estos productos alimenticios definitivamente son beneficiosos para el cuerpo. No es de extrañar que una persona pueda sobrevivir lo suficiente comiendo solo pan de centeno y bebiendo agua. Pero el pan blanco es una historia completamente diferente. En el siglo XX, la harina comenzó a producirse industrialmente, lo que empeoró significativamente su calidad. Por lo tanto, recomendamos encarecidamente que rechaces el pan blanco horneado de harina de calidad superior. A continuación te explicamos por qué deberías hacerlo.

Inicialmente el grano de trigo es rico en vitaminas. Pero todos los nutrientes, durante el procesamiento del grano y la elaboración de la harina, simplemente desaparecen. La harina blanca de calidad superior retiene solo el 30% de las sustancias útiles y pierden sus propiedades beneficiosas en 2 semanas. ¿Y cuál es la vida útil de la harina? Son 12 meses. Es decir, el pan blanco adorado por todo el mundo, está hecho de un polvo blanco inútil, llamado harina de calidad superior.

Razón 2: Falta de sabor

Debes admitir que el pan blanco no tiene sabor. Pero precisamente por eso lo eligen muchas personas. No interfiere con el sabor de los alimentos que acompaña: carne, sopa, queso. Pero no los mejora, como podría hacerlo el pan integral.

Razón 3: Toxicidad

En el mundo moderno el trigo se cultiva a gran escala. Para aumentar la producción y hacerla más rápida, el trigo se rocía con pesticidas y para deshacerse de los roedores y hongos, se trata con diferentes compuestos químicos. Pero eso no es todo. Para que la harina sea más blanca, los fabricantes usan las mismas sustancias para su blanqueo que para el lavado de ropa: peróxido de benzoilo, pirosulfatos de sodio y calcio y dióxido de cloro. Siempre debes averiguar si el pan que compras está hecho de harina refinada u orgánica. La harina refinada pasa por todas las etapas del procedimiento descrito anteriormente.

Razón 4: Erupciones en la piel

Somos lo que comemos. Y si una persona come muchos productos de harina, entonces ciertamente afectarán su piel. La erupción en la piel suele ser el resultado de la reacción al gluten (gluten de trigo) contenido en el pan. El gluten prácticamente no se excreta del cuerpo y se acumula en las paredes del tracto gastrointestinal, dañando sus vellosidades. Con el tiempo, perturba la función de la absorción de nutrientes por estas fibras. Por lo tanto, revisa tu dieta antes de volver a la esteticista.

Razón 5: Trastornos digestivos

Es otro caso en el que podemos culpar a gluten: afecta la integridad de las células en el intestino, y por lo tanto, una persona adquiere varios trastornos del sistema digestivo. El pan integral contiene un elemento muy importante para el cuerpo humano: la fibra. Y los productos de harina de calidad superior prácticamente no la contienen. Solo 5 — 6 trozos de pan integral por día te proporcionan la cantidad diaria de fibra. Si deseas obtener la misma cantidad de fibra de verduras y frutas, tendrás que comer 14 manzanas, o 21 zanahorias, o 25 tomates, o 2,3 kg de pepinos.

Razón 6: Envejecimiento prematuro

Como te habrás dado cuenta, el pan blanco es un producto carente de nutrientes. Al ingerir alimentos que no contienen vitaminas necesarias, nuestro organismo no puede mantener la frescura y la juventud. Así que los consumidores de harina suelen parecer mayores de su edad.

Razón 7: Adicción

El pan puede “engancharte” como si fuera una droga. La harina proporciona una sorprendente liberación de azúcar en la sangre y, como resultado, la producción de la hormona insulina. Comiste solo un bocado de harina, pero tu nivel de azúcar subió enseguida y se bajó igual de rápido, por eso te sientes debilitado y nuevamente quieres comer carbohidratos rápidos para sentir un subidón de energía. Un salto tan brusco en los niveles de azúcar en la sangre puede incluso conducir a la diabetes.

Razón 8: Sobrepeso y obesidad

Es una de las razones más importantes para muchas personas a la hora de excluir la harina de su dieta diaria. Más del 70% de las personas que excluyen bruscamente el pan de su dieta, bajan de peso en las primeras 2 semanas. 100 g de harina de calidad suprema contienen solo 0.6 g de fibra, y el resto de su contenido se asienta notablemente en tus muslos, lados y abdomen en forma de pliegues de grasa. El pan tiene un índice glucémico incluso más alto que las barras de chocolate. Y el almidón contenido en los productos de panadería se descompone rápidamente en el tracto digestivo y entra en el torrente sanguíneo en forma de glucosa, lo que significa que pronto volverás a sentir hambre.

Ten cuidado y acostúmbrate a estudiar la composición de los productos que compras