El hígado es un órgano muy importante que es responsable de muchas funciones en nuestro cuerpo: su falla puede ser fatal. En la actualidad, se estima que 5,5 millones de estadounidenses padecen alguna enfermedad hepática crónica o cirrosis. Por lo tanto, es importante conocer los síntomas de los problemas hepáticos para prevenir algo más serio.
Recopilamos 8 síntomas del daño hepático que deberían hacerte acudir al médico de inmediato.
1. Puedes notar que tu piel y tus ojos se vuelven amarillos
Si tienes este síntoma, es probable que tu hígado tenga un gran problema. Esta condición se conoce como ictericia que causa la pigmentación amarilla de la piel, la parte blanca de los ojos y la mucosidad. El color amarillo aparece debido al exceso de bilirrubina que contiene un pigmento naranja amarillento que se encuentra en la bilis del hígado.
Cuando un hígado está sano, descompone fácilmente la bilirrubina. Pero si está seriamente dañado, literalmente te vuelves amarillo.
2. Puedes sentirte fatigado y deprimido
No es solo cansancio habitual, sino algo más. La fatiga se caracteriza por la falta de energía mental y física. No tienes la motivación para hacer nada. A veces, te sientes solo por la mañana, levantarse de la cama se convierte en una tortura. Otras veces te acompaña durante todo el día.
3. Es posible que tengas hinchazón abdominal
La hinchazón abdominal puede ser uno de los síntomas más incómodos y dolorosos. Ocurre cuando el líquido se retiene en el abdomen. En algunos casos, el vientre puede hincharse tanto que la persona parece estar embarazada. Como consecuencia de la acumulación de líquido, se observa la hinchazón en las piernas y tobillos.
4. Es posible que tengas falta de apetito y pérdida de peso
Por lo general, en estos casos, los médicos observan más del 10% de la pérdida de peso que puede estar relacionada con la hinchazón abdominal. Cuando estás muy hinchado, no tienes ganas de comer ya que la comida te causa dolores abdominales.
5. Puedes notar angiomas en araña en tu piel
Un angioma en araña se parece a una red de pequeñas arteriolas dilatadas ubicadas muy cerca de la superficie de la piel. Si los encuentras en la mitad superior del tórax, las manos, el cuello y la cara, puede ser un signo de enfermedad hepática.
6. Puedes encontrar moretones en tu cuerpo
Si tu hígado está dañado, la producción de proteínas se detiene o se vuelve más lenta, lo que causa trastornos de coagulación sanguínea. Es por eso que una persona con daño hepático sangra o se lastima más fácilmente que una persona sana.
7. Tu orina puede tener un color oscuro
Puede variar su tono, pero en general, el color de tu orina se verá más oscuro de lo habitual. Puede presentar una coloración marrón, naranja oscuro o ámbar. Ocurre debido al exceso de bilirrubina en el hígado que no puede descomponerse.
8. Puedes sentir picazón
Por supuesto, todos pueden sentir picazón de vez en cuando. Pero cuando tu hígado está en problemas, puedes experimentar la picazón más localizada. Ocurre debido a las toxinas que el hígado ya no puede filtrar. Cuando tu cuerpo está muy intoxicado, la picazón se hace muy intensa, especialmente durante la noche.