Todas las relaciones cambian con el tiempo. Cuanto más tiempo pasen juntos, más cambios suceden. Algunos de ellos pueden ser aterradores o inquietantes. Sin embargo, si los miras más de cerca, quedará claro que son solo una nueva etapa de tu amor.
A continuación te mostraremos algunos hechos a los que debes prestar atención si quieres mejorar la calidad de tus relaciones amorosas.
1. La confianza es extremadamente frágil.
Todas las relaciones se basan en la confianza y, a veces, puede parecer muy sólida. Este es un sentimiento muy engañoso y peligroso porque la confianza entre los cónyuges se puede romper muy rápida y fácilmente.
2. A veces se aburrirán juntos.
Las parejas que no se aburren juntos solo existen en nuestros sueños. En la vida real, un libro o una reunión con amigos puede ser más interesante que una velada con tu cónyuge. No significa que haya una distancia entre ustedes. Solo descansen un poco por separado, y pronto se divertirán nuevamente.
3. No siempre estarán de acuerdo.
Incluso si toman todas las decisiones importantes por unanimidad, tarde o temprano llegará un momento en que estarán en lados opuestos por una cuestión de principios. Es importante no enojarse con tu alma gemela y encontrar una manera de salir de esta situación juntos.
4. El matrimonio y los hijos no son solo una decisión, son un desafío.
Muchas personas creen erróneamente que el matrimonio fortalecerá su relación o que los hijos pueden cerrar la brecha entre los cónyuges. Sin embargo, tanto el matrimonio como la paternidad son pruebas muy difíciles, y no hay nada de malo en eso. Aprenderás a ser un buen compañero y padre, tal como aprendiste a andar en bicicleta. Sí, te caíste un par de veces, pero mejoró mucho más tarde.
5. No se sentirán atraídos el uno por el otro para siempre.
Una relación es tremendamente apasionada al principio. La pasión se va, y la vida amorosa se vuelve más tranquila. A veces esto puede convertirse en un problema. Lo más importante es no caer en la desesperación y pensar que tal vez no debían estar juntos. Puedes arreglar todo.
6. Te sentirás solo a veces.
Podría parecer que una relación, y aún más un matrimonio, es lo opuesto a la soledad, pero eso no es realmente cierto. A veces te sentirás solo, y te parecerá que nadie te entiende y nadie se preocupa por ti. Cada persona tiene tales pensamientos de vez en cuando, no importa si están casados o no.
7. Tendrás pensamientos extraños.
“¿Debo divorciarme?” “¿Podría haber estado más feliz con otra persona?” Tales pensamientos pueden llegar incluso a las parejas más felices. La gente suele pensar en estas cosas por la noche o cuando están solas. Estas preguntas son tan importantes como ” ¿Cómo sería mi vida si naciera en Francia?”
8. Perderás la conexión de vez en cuando.
A veces sientes que tú, tu destino y tu corazón están todos conectados con la persona que amas. Y a veces esta conexión parece desaparecer. Es normal. Lo más probable es que estés muy cansado.
9. Se lastimarán el uno al otro.
Nadie puede lastimarte más que la persona que amas. Tomas sus palabras en serio más que las de cualquier otra persona. En medio de una pelea, tu compañero también puede golpearte donde más te duele. Se lastimarán el uno al otro. Lo más importante es lidiar con los problemas cuando aparecen, no cuando ya es demasiado tarde.
10. El amor no puede sobrevivir por sí solo.
Muchas personas a menudo nos recuerdan que “amor” también puede ser un verbo. Es una acción, no solo un sentimiento. Tenemos que trabajar en nuestras relaciones. Tenemos que hacerlo juntos.