Hay muchos consejos culinarios, y lifehacks en general, que se convierten en fenómenos virales en las redes. Pero lo cierto es que muchas veces no está demostrado hasta qué punto son eficaces.
Hemos puesto a prueba esos trucos culinarios que tienen miles de “me gusta”, y el resultado es de lo más curioso. ¡Esperamos que os parezca tan interesante como a nosotros!
Para cortar los tomates cherry a la mitad, ponlos entre dos platos planos y pasa un cuchillo entre ellos.
Resultado: Cortar tomates de esta manera no es muy cómodo, ya que solo podrás cortar unos cuantos, y los demás tendrás que hacerlo a mano. Quizás funcione con un cuchillo muy afilado, pero no lograrás cortarlos todos de forma igual.
Conclusión: No funciona.
Para que la leche no se escape de la olla a la hora de hervir, pon una cuchara de madera encima.
Resultado: La leche se escapó y ninguna cuchara pudo detenerla.
Conclusión: No funciona.
En el microondas se puede preparar un muffin rápido y delicioso en una taza.
Resultado: Para ser sinceros, el resultado no gustará a todo el mundo, ya que su consistencia es medio gomosa y parece más un hotcake que un muffin. Aunque seguramente dependa mucho de la calidad de los ingredientes.
Conclusión: Funciona, pero no le gustará a todo el mundo.
Después de la cocción, podrás retirar fácil la cáscara de los huevos si los dejas reposar en agua fría.
Resultado: El truco que usaban nuestras abuelas de verdad funciona —después de dejarlos reposar en agua fría, los huevos se pelaron mucho mejor—.
Conclusión: Funciona.
Un par de uvas congeladas te ayudarán a enfriar el vino rápidamente.
Resultado: A diferencia del hielo, el cual se derretirá en la copa, las uvas congeladas no disuelven la bebida, la enfrían rápidamente… ¡y quedan bonitas!
Conclusión: Funciona.
Para evitar las “lágrimas de cebolla” te será útil la sal espolvoreada sobre la tabla para cortar.
Resultado: Durante este experimento detectamos que las lágrimas con este truco disminuyen, pero no desaparecen.
Conclusión: Funciona, pero no mucho.
Si pones el envase con helado en una bolsa antes de congelarlo, no quedará tan duro y será mucho más fácil comerlo.
Resultado: El helado recién sacado del refrigerador es bastante duro, y es difícil servirlo de forma bonita en un plato. Después de este truco, el helado se volvió más suave y logramos hacer unas bolitas bonitas.
Conclusión: Funciona.
Si te sobró aguacate, pon en el refrigerador la mitad que conserva su hueso, así no perderá su frescura.
Resultado: Dejamos una mitad de aguacate con hueso y otra, sin él. Dos días después, ninguna de las dos mitades lucía demasiado fresca.
Conclusión: No funciona.
Para pelar el ajo rápidamente, es suficiente ponerlo en un frasco y sacudirlo bien.
Resultado: Es un buen truco si necesitas pelar varios dientes de ajo a la vez. Pero no olvides cortarles las puntas y sacudir el frasco bien, porque de lo contrario no funcionará.
Conclusión: Funciona.
Puedes conservar las hierbas frescas congeladas en el aceite de oliva para agregarlas a tus platillos después.
Resultado: El truco depende completamente de la calidad del aceite: si usas aceite de oliva no refinado, se congela bien a la temperatura +5… pero el aceite de oliva refinado no se congelará y el truco fracasará.
Conclusión: Funciona si usas aceite de buena calidad.
El jugo de limón puede prevenir que las rebanadas de manzana recién cortadas se pongan oscuras.
Resultado: Rociamos las manzanas con una pequeña cantidad de jugo de limón fresco. El resultado fue el esperado: las frutas no solo no se oxidan, sino que además se blanquean.
Conclusión: Funciona.
Los plátanos conservan su frescura durante más tiempo si envuelves sus tallos con un plástico para la cocina.
Resultado: Envolvimos un plátano con un plástico, y dejamos el otro al natural. Las dos frutas se quedaron igual después de tres días.
Conclusión: No funciona.
Una media y cinta adhesiva te ayudarán a cocer un huevo al revés.
Resultado: La misión resultó imposible, ya que girar el huevo rápidamente es muy difícil, y después de la cocción, el huevo se pelaba con dificultad. Puede que funcione si tienes una fuerza impresionante… y mucha paciencia.
Conclusión: No funciona.
Si pones un ramillete de hierbas aromáticas al agua y lo tapas con una bolsa, podrás mantenerlo fresco durante varios días.
Resultado: Usamos un ramillete de perejil como dice el truco, y el otro como estaba. Unos pocos días después, el resultado era claramente notable: ¡gracias al truco, se mantuvo el perejil fresco al 100%!
Conclusión: Funciona.
¿Qué os parece a vosotros?