Durante el sueño, nuestro cerebro entra en un estado de automantenimiento que nos ayuda a desarrollar todas nuestras actividades y procesar nuevos conocimientos. Entonces, ¿qué pasa si no dormimos bien? Si pasa mucho tiempo para que puedas dormir por las noches, duermes por cortos periodos de tiempo y la calidad de tu sueño es mala, probablemente te levantes con la sensación de estar fatigado el resto del día.

Algunas personas tratan problemas como el insomnio y la mala calidad de sueño con distintos tipos de medicamentos, otras con ejercicio y mejorando sus hábitos. Pero también existen personas que se acostumbran a vivir de esta manera sin saber que, además de la fatiga, existen riesgos a largo plazo que pueden deteriorar su salud.

A continuación te presentamos una lista de padecimientos para que prestes atención a cuántas horas de sueño recibes y si descansas adecuadamente.

1. Mala memoria

Las sinapsis son estructuras que permiten a nuestras neuronas compartir información entre ellas. Si tu cerebro no recibe la cantidad suficiente de descanso efectivo, su funcionamiento se deteriora, haciendo que no logres conectar la información almacenada en la memoria con la información que necesitas utilizar ese momento, o bien que este proceso sea muy complicado y lento.

Cada día que duermes menos, este problema va en aumento; pero la buena noticia es que existe una mejora a corto plazo, tu cerebro puede recuperar sus funciones normales.

2. Infartos

El insomnio y otros trastornos del sueño aumentan la probabilidad de sufrir un infarto y otros problemas cardíacos. Esto sucede porque, cuando no duermes o duermes mal, tu metabolismo se ve alterado, aumentando la presión arterial, haciendo tus arterias más estrechas y acercándote a la posibilidad de tener este tipo de problemas vasculares, además de hipertensión.

Si mejoras tus hábitos de sueño a temprana edad, puedes revertir los efectos en tu presión sanguínea. Sin embargo, en edades más avanzadas, se pueden prevenir infartos con tratamiento, pero el riesgo seguirá latente. Por eso es recomendable mejorar tus hábitos de sueño lo más pronto posible.

3. Problemas digestivos

Distintos órganos se ven afectados cuando no duermes bien, principalmente el estómago, páncreas e intestinos. Dormir menos de 5 horas inhibe la hormona que nos hace sentir satisfechos y es por esta razón que el día siguiente, “necesitamos” comidas con muchos azúcares, harinas y grasas, dificultando nuestra digestión, ocasionando problemas como estreñimiento, colon irritable, diarrea y, en algunos casos extremos, hasta diabetes. Esto sucede porque, sin un descanso adecuado, no asimilamos los nutrientes que entran a nuestro sistema correctamente.

4. Falta de libido

Como mencionamos anteriormente, la falta de sueño afecta de manera importante nuestro metabolismo, generando desajustes hormonales que repercuten en distintos aspectos de nuestra vida y la sexualidad no es la excepción.

Cuando nuestro descanso no es adecuado, nuestro deseo sexual disminuye. También se reduce la sensibilidad tanto en hombres (alterando sus niveles de progesterona y producción de espermatozoides) como en mujeres (ocasionando alteraciones en los niveles de estrógenos, progesterona y testosterona). Estas son las hormonas responsables de que nuestros sistemas reproductivos funcionen adecuadamente.

5. Depresión

La depresión y las alteraciones en el sueño están muy relacionadas, ya sea que la depresión nos haga dormir más tiempo o simplemente dejar de dormir. Pero también es cierto que la falta de sueño, puede causar depresión.

El sueño es fundamental para restaurar, no solo nuestro cuerpo, sino nuestro bienestar emocional. Es por eso que, si no tenemos un sueño profundo y un descanso adecuado, tenemos 5 veces más probabilidad de sufrir de enfermedades mentales como la depresión. Esta enfermedad ocasiona falta de interés en asuntos cotidianos, tristeza e hipersensibilidad emocional.

6. Cáncer

Según la Sociedad Americana del Cáncer, dormir menos de seis horas y de manera deficiente aumenta nuestra posibilidad de desarrollar cáncer. Al no dormir, nuestra respiración se ve alterada y el oxígeno no entra de manera adecuada a nuestro organismo, haciendo que nuestras células no sean capaces de defenderlo de agresiones. Esto favorece el riesgo de sufrir cambios en las células del colon. El insomnio también está ligado a la aparición de cáncer de mama y próstata.

7. Resfriados

Así como hablamos de cáncer, también existen padecimientos menores que podrías ya haber notado si la falta de sueño es parte de tu vida. Este es el caso de los resfriados, ya que el sistema inmune no está apto para defender tu organismo de virus o bacterias, haciéndote susceptible a las enfermedades como esta.

8. Infecciones

La falta de sueño aumenta las probabilidades de contraer infecciones debido a que el sistema inmune no se encuentra en óptimo funcionamiento. Las infecciones más comunes son en vías respiratorias, urinarias, estomacales y vaginales, ya que estas se ocasionan por elementos con los que convivimos diariamente, pero al no estar suficientemente protegidos por nuestras células, ellos logran entrar en nuestro organismo ocasionando síntomas como debilidad, malestar y fiebre.

9. Problemas de la vista

A falta de sueño, el cerebro no es capaz de procesar imágenes o símbolos simples, además de que está luchando constantemente contra la fatiga que conlleva una noche de mal descanso. A largo plazo, también puede ocasionar problemas como fatiga visual, irritación, conjuntivitis o fotofobia.

Descansar de manera adecuada por las noches le permite a tus globos oculares recuperarse del trabajo que han realizado a lo largo del día, quedando listos para desempeñar sus funciones al día siguiente.

10. Sobrepeso

Es verdad que una de las causas de la obesidad y el sobrepeso es el sedentarismo. Podría sonar contradictorio el saber que también la falta de sueño es un factor para este mismo padecimiento, pero es así.

Como mencionamos anteriormente, cuando nos referimos al sistema digestivo, las hormonas que regulan el hambre se ven alteradas, haciendo que tengamos preferencia por alimentos dulces o grasosos. Pero si a esto le agregamos la fatiga que conlleva una noche de mal sueño, esto hace que despertemos con menor energía para realizar actividad física, lo que lleva al sobrepeso.

Bono: mejora tu calidad de descanso con estos tips

Todos estos puntos son razones para hacer del sueño reparador una prioridad en tu rutina diaria, un gran inicio si estás buscas cambiar tus hábitos con el fin de mejorar tu salud. Sigue estos tips que te ayudarán a lograr el objetivo.

Ten una rutina: así ayudarás a tu cuerpo a saber cuándo le corresponde estar activo y cuando descansar. Es una forma de guiarlo y decirle a qué hora tiene que dormir.

Cuida tu ambiente: apaga las luces a determinada hora para que tu cuerpo sepa que se acerca la hora de dormir.

Hidrátate: bebe suficiente agua como para que no tengas que levantarte por la noche pero no tanta como para tener que ir al baño interrumpiendo tu sueño.

Haz deporte: por las mañanas es mejor, ya que aumenta tu energía y reduce el estrés. Así por las noches el descanso será más que necesario.

Cena ligero: procura cenar de 2 a 3 horas antes de ir a dormir para que tu cuerpo descanse completamente.

Haz un ritual: antes de ir a dormir, lee un poco, escucha música relajante o medita. Que todas tus acciones antes de dormir estén ligadas a la hora de ir a la cama.

Distráete: si no puedes dormir, quedarte en cama viendo el techo no es lo mejor que puedes hacer. Sal de la cama y haz alguna actividad que requiera concentración. Tu cerebro pedirá el descanso.

Apaga el móvil: las redes sociales y las notificaciones nos mantienen en estado de alerta. Sin mencionar la luz de las pantallas. Mejor date un tiempo libre de la comunicación con el exterior.

Luz del sol: muchas veces, estando en la oficina o en casa, olvidamos tomar la luz del sol por unos minutos. Esto ayuda a conciliar el sueño por las noches.

Mejora tu alimentación: cambia las harinas y azúcares por vitaminas y minerales. Dale la bienvenida a los vegetales y frutos a tu vida. Tu sueño lo agradecerá.

Y tú, ¿cuántas horas duermes al día? Si padeces insomnio, ¿qué es lo que haces para conciliar el sueño? Déjanos tus comentarios.