Según encuestas recientes, el 44 % de las parejas casadas creen que pelear más de una vez a la semana les ayuda a mantener relaciones saludables y productivas durante mucho tiempo. De hecho, las relaciones en donde se discute a menudo, pero siempre de manera pacífica, tienen más probabilidades de permanecer unidas, porque a pesar de todos los pequeños malentendidos, tanto el novio como la novia saben que su amor es verdadero y sincero.
Investigamos y descubrimos por qué las riñas ocasionales pueden ser buenas para tu relación.
9. Pelear es un signo de una relación madura
El evitar los conflictos constantemente no es la mejor manera de construir una relación duradera. Por el contrario, si eres capaz de decir lo que piensas con claridad cuando estás discutiendo, significa que estás listo para llevar tu amor a otro nivel.
Las personas maduras tampoco recurren a ataques personales ni a gritos. En lugar de eso, siempre intentan llegar a un compromiso y mejorar su relación con la ayuda de un argumento saludable.
8. Pelear significa que algo te importa
Por supuesto, sería mucho más fácil pasar por alto algunos hábitos de tu pareja que te vuelven loco. Pero el hecho de que estés listo para soportar todo el dolor y la incomodidad de luchar para obtener un mejor resultado en tu relación a futuro puede ser un signo de que sientes un verdadero amor.
En otras palabras, discutir significa que estás muy comprometido con la relación. Solo recuerda: ¿con qué frecuencia peleas con tus padres o tus hermanos? Lo mismo ocurre con tu pareja. Esto significa que tienes es un panorama más grande de la situación con tu ser querido.
7. Pelear facilita la comunicación
Para crear confianza en tu relación de pareja, no debes quedarte callado. Por el contrario, es necesario acercarse al ser amado con una mente abierta, responsabilizarse de sus acciones y escucharse ambos con atención.
Dado que la discusión es una de las principales formas de comunicación y la más honesta, este proceso realmente ayuda a acelerar los sentimientos de intimidad, confianza y la conexión entre ambos. Además, les enseña a tu pareja y a ti a comunicarse de una manera más productiva.
6. Pelear es un signo de una relación de pareja sana
Los psicólogos creen que hay 7 puntos clave para una relación sana, y discutir es una de ellas. De hecho, si una pareja nunca pelea, esto puede ser una señal de que algo no está bien con ellos.
El discutir ayuda a las parejas a reconsiderar sus valores y sentimientos, abordando las cosas que son importantes para ellas. Sin embargo, los argumentos deben ser saludables y no combativos: siempre trata de declarar tus puntos sin insultar o elevar la voz.
5. La lucha hace que la conexión sea más fuerte
Cuando estás discutiendo con tu pareja, no importa si ganas o pierdes. Lo más valioso es que aprenden mucho sobre ambos y, lo que es más importante, sobre ti mismo.
Los pequeños conflictos ayudan a ambos a revelar su verdadera naturaleza y a mostrarle a tu pareja cómo lidiar contigo. Y si logran superar todos esos desafíos juntos, aprenderán a comprometerse y fortalecerán el vínculo entre los dos.
4. La riña alivia tu resentimiento
Estar en una relación no es tan fácil: si te preocupas por tu pareja siempre tienes que mejorar y flexionar tus límites. Y si la otra parte no hace lo mismo, puedes comenzar a guardar resentimiento.
No defender tu posición cuando se trata de las cosas que son importantes para ti, puede hacer que tu pareja piense que puede tener lo que quiera y eso hará que tu resentimiento crezca. Ese es el camino hacia una relación enfermiza.
La mejor manera de lidiar con este problema es dejar salir tus sentimientos negativos y demostrarle a tu pareja que ambos son iguales cuando se trata de las propias necesidades.
3. Pelear significa que es más probable que sigan juntos
Según algunos estudios, el error más grande que las parejas suelen cometer es evitar los problemas: a menudo sentimos que algo está mal pero no decimos nada. Y esta mala comunicación se convierte en la razón más común para terminar una relación.
Aunque se podría pensar que discutir temas delicados no sería bueno para una pareja, en realidad, no es verdad. Pelear te permite enfocarte en tus problemas y resolverlos antes de que sean demasiado grandes. Es por eso que las parejas que discuten permanecen juntas por un período más largo de tiempo que las que no lo hacen.
2. La pelea revela tu pasión
Algunas parejas realmente disfrutan de las discusiones intensas porque aumentan sus niveles hormonales. Subconscientemente, esas personas saben que pelear es solo un signo de su pasión, y sus desacuerdos terminan en una reconciliación muy apasionada.
Si deseas mantener una relación fuerte y próspera, es necesario dejar salir las emociones de vez en cuando en lugar de mantenerlas reprimidas. Pero no olvides terminar cualquier discusión de una manera positiva.
1. Pelear te salva del aburrimiento
Aunque hayas estado con tu pareja por mucho tiempo, siempre habrá cosas en las que no estarás de acuerdo con ella. Eso está bien y no tiene nada de malo: los conflictos constructivos pueden alimentar la chispa de tu relación y hacerla más emocionante.
¡Imagínate lo aburrido que sería tu amor si ambos estuvieran de acuerdo en todo! Así que no te preocupes la próxima vez que sientas que habrá una discusión entre tu pareja y tú. ¡En lugar de eso, intenta que sea beneficioso para tu relación y la vida futura juntos!
Bono: cómo tener una pelea saludable con tu pareja
Siempre es importante recordar que hay diferencias entre una buena discusión y una muy mala. Solo la primera de estas puede ser beneficiosa para tu relación.
Aquí hay algunos consejos que debes seguir para convertir tu argumento en una discusión productiva:
- Respetarse mutuamente. Ambos son seres humanos con sus propios puntos débiles, así que no trates de golpear bajo apuntando a cosas que podrían lastimar irreversiblemente a tu pareja.
- Pedir disculpas. Si te equivocaste, admítelo y di que lo sientes. Esta pequeña acción no te hará sentir más débil. Por el contrario, esto mostrará a tu pareja lo mucho que te preocupas por ella.
- Apegarse a lo actual. Nunca menciones la experiencia de tus relaciones anteriores o los errores de tu pareja que ya has dejado pasar. Solo tienes un punto o un tema para discutir, así que trata de ser lo más preciso posible.
- No apelar a terceros. El poner a tus amigos o parientes en tu discusión puede hacer que tu pareja se sienta aislada y sin respeto, así que haz lo mejor para resolver el problema por tu cuenta.
¿Con qué frecuencia peleas con tu pareja? ¿Siempre terminas las discusiones con una tregua?