A menudo recurrimos a los medicamentos y estamos seguros de que sabemos lo suficiente sobre ellos. Pero, de hecho, muchas de nuestras creencias acerca de los fármacos, inyecciones y plantas medicinales están totalmente anticuadas, y algunas resultaron ser nada más que mitos.
Decidimos averiguar cuáles son los mitos erróneos populares sobre los medicamentos que la gente aún sigue creyendo.
Las píldoras anticonceptivas aumentan el riesgo de cáncer
Estudios recientes demuestran que tomar anticonceptivos no solo no aumenta el riesgo de desarrollar cáncer, sino que también lo reduce. Por lo tanto, las mujeres que tomaron anticonceptivos, rara vez sufrieron cáncer de útero, ovarios, colon y recto, o cualquier otro tipo de cáncer. Además, cuanto más tiempo tomas anticonceptivos, mayor será el efecto “anticáncer”.
La homeopatía es completamente inofensiva
La homeopatía no se reconoce oficialmente como una ciencia, pero los medicamentos homeopáticos pueden contener pequeñas dosis de la sustancia activa. Por lo tanto, si tomas estos medicamentos durante mucho tiempo y en grandes cantidades, la sustancia activa se acumula en el cuerpo y puede producir efectos secundarios e interactuar con otros medicamentos, alterando el curso del tratamiento.
Además, los medicamentos homeopáticos se producen en contra de los estándares internacionales de medicina basada en evidencia y pueden contener componentes potencialmente peligrosos. Por ejemplo, en 2017, los científicos estadounidenses encontraron belladona en los remedios para la dentición. El efecto de esta sustancia venenosa en el cuerpo de niños menores de 2 años es desconocido y, por lo tanto, es impredecible.
Cuanto más caro sea un medicamento, más efectivo será
La gente está convencida de que mayor precio indica más calidad. Además, no se debe intentar ahorrar si se trata de salud. Sin embargo, los medicamentos suelen tienen análogos más económicos y, al mismo tiempo, de la misma calidad que los costosos. Sin embargo, en ningún caso debes reemplazar el medicamento recetado por tu propia cuenta, primero tienes que consultar con tu médico.
La fitoterapia es mejor que los medicamentos convencionales
Solemos creer que los medicamentos a base de ingredientes naturales son inofensivos, a diferencia de los remedios sintéticos con muchos efectos secundarios. De hecho, resulta que los remedios a base de plantas medicinales provocan alergias, intoxicaciones y reacciones impredecibles con más frecuencia de lo que pensamos. Esto se debe a que las plantas pueden contener sustancias tóxicas y alcaloides, por lo que no pueden ser administradas sin control y en dosis excesivas.
Por ejemplo, a menudo ocurre una reacción alérgica a la equinácea. A veces es solo una erupción y picazón, pero a veces son ataques de asma e incluso anafilaxia.
Se puede combinar diferentes tipos de tratamientos
A menudo descuidamos nuestra seguridad y tomamos varios medicamentos a la vez. Muchos de nosotros sabemos que esto puede provocar complicaciones y problemas de salud. Sin embargo, poca gente se da cuenta de que la combinación de remedios naturales entre sí o con otros tipos de medicamentos puede ser incluso más peligrosa. Es decir, una infusión inofensiva junto con una pastilla o incluso con otro remedio natural puede provocar una reacción inesperada. Esto se debe a que un remedio a base de plantas medicinales contiene muchos componentes diferentes.
Por ejemplo, se sabe que el regaliz reduce la efectividad de los medicamentos para pacientes hipertensos. Y la hierba de San Juan, por el contrario, aumenta el efecto de los medicamentos anticoagulantes, lo que puede llevar a una hemorragia.
El médico se equivoca prescribiendo una dosis diferente de la indicada en el prospecto de medicamento
A veces sucede que un médico prescribe el medicamento en una dosis diferente a la indicada en el prospecto de medicamento. O prescribe un medicamento que está prohibido por la instrucción al niño. Hay pocas posibilidades de que el médico sea incompetente, lo más probable es que esté contraviniendo las instrucciones confiando en su experiencia y por el bien del paciente.
Si anteriormente no fuiste alérgico a algún medicamento, entonces nunca lo serás
Cualquier alergia, incluso provocada por la medicación, puede ocurrir en una persona que anteriormente no era propensa a ella. Esto se debe a cambios en el cuerpo y el medio ambiente.
Los remedios naturales, los antibióticos, especialmente la penicilina, y los analgésicos como el ibuprofeno y la aspirina causan alergias con mayor frecuencia.
Cuantos menos efectos secundarios y contraindicaciones, mejor
No se puede afirmar inequívocamente que menos efectos secundarios significan mejor calidad del fármaco. A menudo, sucede lo contrario: una gran lista de ellos sugiere que el medicamento se ha investigado exhaustivamente y están previstas todas las posibilidades de su impacto negativo.
En cuanto a los medicamentos potentes, en este caso es normal una gran cantidad de efectos secundarios, pero esta vez hay que elegir el menor de los males.
Además, los efectos secundarios no siempre se manifiestan, o no se manifiestan en absoluto, así que no te preocupes demasiado por esto.
Es inevitable la disbiosis al tomar antibióticos
Tomar antibióticos no siempre amenaza con causar problemas intestinales. Su impacto negativo depende del estado de tu cuerpo, tu reacción individual, la exactitud de la administración de medicamentos y su novedad. Por lo tanto, es más probable que una persona que abusa de los antibióticos, especialmente sin receta médica, tendrá manifestaciones desagradables de disbiosis. Además, muchos antibióticos modernos son más suaves y no causan problemas con el tracto gastrointestinal, por lo que puedes pedirle a tu médico que elija un medicamento que sea moderno y más seguro.
Los antibióticos son más efectivos en inyecciones que en pastillas
Esta afirmación está desactualizada desde hace un par de décadas. En aquel entonces, las píldoras no se consideraban justificadamente efectivas: la biodisponibilidad de las inyecciones (un indicador de la cantidad de medicamento que se introdujo en la sangre) fue aproximadamente del 80 % y la de los medicamentos que se toman por vía oral, de 40 a 60 %. Pero hoy en día las pastillas se han mejorado: su biodisponibilidad se ha incrementado a 90-95 %, y algunas veces son más efectivas que las inyecciones. Además, se cree que tomar pastillas es mucho más seguro.
Pero incluso ahora hay fármacos que tiene sentido inyectar, ya que se destruyen por las enzimas en el estómago.