No hace falta ser un experto en modas para vestirse bien. Basta con saber algunas buenas combinaciones de colores, tener noción de qué prendas son adecuadas para cada ocasión y saber reconocer ropa de mal gusto. A pesar de esto, hay personas que simplemente no nacieron con este “chip”, lo cual se presta para decisiones de moda bastante cuestionables (y graciosas). Echa un vistazo.