Estas series increíbles cerraron todo de manera decepcionante..
Muchas son las series que consiguen buen rating, un gran grupo fans y tienen un cierre correcto. Caso más extraño son aquellas series que realmente la rompen y su final decepciona cómo si hubiese sido creado por un amateur y no por la misma persona que nos trajo los primeros capítulos. ¿Los ejemplos? están más qué claros.
Este artículo claramente contiene SPOILERS si todavía estás viendo alguna de estas series, simplemente pasá al siguiente número del artículo.
1. LOST.
Un final que oscurece más que aclarar, después de 4 temporadas increíbles y otras 2 flojas, LOST finaliza con todos reunidos en un “limbo” antes de partir al cielo por así decirlo. Muchos malinterpretaron el final creyendo que todos estaban muertos desde el accidente, pero no es así, quienes mueren van a parar al limbo y creen que están vivos, cuando en realidad están esperando a los demás para reunirse. Algo flojo si pensamos que Kate y Sawyer mueren de viejos en Estados Unidos, por lo tanto una vez que superaron la isla y a sus amores pasados, tienen que VOLVER A VERLOS… Un poco cruel ¿no? Ah y claro, hay muchas cosas de la isla que quedaron sin explicar… en fin.
2. Dexter.
«Dexter» otro ejemplo de serie cuyos creadores estiran por encima de sus posibilidades. La historia del asesino en serie que trabaja como forense para la Policía de Miami, mientras elimina por su cuenta a otros asesinos, nunca debió llegar a las 8 temporadas. Ya en la última temporada todo parecía ir encaminado a un final trágico, en el que Dexter Morgan acabaría expiando sus pecados a través de su propia muerte. De forma sorprendente, su protagonista, Michael C. Hall, aparecía en una última escena convertido en un leñador barbudo, alejado de la civilización, tras un naufragio del que se había salvado milagrosamente. Un capítulo soso y aburrido.
3. How I met your mother.
Imposible que no estuviese en esta lista. Después de 9 temporadas esperando conocer a la madre y ya tomándole cariño según las descripciones de Ted Mosby, la vemos en solo DOS capítulos porque muere, y no solo muere… sino que Ted vuelve con Robin, sí, Robin la que estuvo con Barney, con Ted, con Barney, con Ted… y ya saben cómo sigue.
4. Two and a half men.
Desde la partida de Charlie Sheen no hubo manera de remontar la serie, no encontraban la vuelta, Ashton Kutcher no pudo llenar el vacío y tuvieron que recurrir tristemente a un doble de Charlie. En el último capítulo se descubre que Charlie está vivo y que quiere matar a Alan y a Walden, para suerte de estos dos personajes un piano lo aplasta… a él y a su creador Chuck Lorre. Sí, un piano hubiese sido mejor antes que aguantar esas temporadas con Ashton.
5. The X-Files.
Oficialmente una de las mejores (si es que no fue la mejor) serie de ciencia ficción. Lamentablemente las últimas temporadas no estuvieron a la altura, sobre todo después de la partida de David Duchovny (Mulder). Por suerte regresa para “The Truth: Parte 1 & 2” –el final original del show en el año 2002- Pónganse una mano en el corazón y admitan junto a nosotros que Carter y su gran equipo de guionistas nunca lograron darle un cierre correcto a este drama plagado de misterios que dejó un sabor a que nada se había resuelto y que estábamos en el mismo punto de partida.
6. Seinfeld.
Este final es bastante polémico, unos lo aman otros lo odian pero hay que incluirlo. Seinfeld fue una serie de comedia creada por el humorista Jerry Seinfeld, la serie fue un boom en los 80 y los 90 pero su final dejó algo tristes a sus fanáticos. El último episodio de la serie se tituló ‘The Finale’ y se dividió en dos partes. En él los cuatro amigos protagonistas Jerry Seinfeld (Jerry Seinfeld), George Costanza (Jason Alexander), Elaine Benes (Julia Louis-Dreyfus) y Cosmo Kramer (Michael Richards) son sentenciados a cárcel por su forma de ser a lo largo de la serie y con una pena de un año… Si bien todo es tratado con humor, es algo triste pensar en los personajes un año encerrados.
7. Friends.
El final de Friends no fue polémico, sino más bien MEH. Claro que todos lloramos un poquito en el encuentro final entre Ross y Rachel, pero para una serie de 10 temporadas, se esperaba un final con algo más. La escena de todos dejando las llaves del departamento de Mónica y Chandler con cara de tristeza, nos dejó un sabor amargo que ni el café de Central Perk pudo curar.