Estar en redes sociales es muy peligroso, sobre todo porque no nos acordamos a quién tenemos agregado. Decimos lo que pensamos, sin filtro, y lo publicamos, y luego pasan cosas como estas: pilladas, llamadas a la policía, o despidos. Y con razón.

La fiesta del siglo

¿Qué pasa cuando te invitan a una fiesta en Facebook? A veces pones “Tal vez asista”, pero luego nunca vas. La coña es que si empiezas a conocer a gente que sí que va, tú también te animas. Esto es lo que pasó con una familia británica, cuya una de sus hijas, convocó “la fiesta del año” por Facebook. Era en una casa de Marbella, que se alquilaba normalmente por semanas.

¿El resultado? Sí, fue la fiesta del siglo, y tuvo que acudir la policía, porque se hizo de todo: arrojaron televisores a la piscina, robaron joyas de la familia, arrancaron puertas… Un destrozo que alcanzó los 7.000 euros.

Despedida el primer día de trabajo

Kaitlyn Walls era una chica de 17 años, madre soltera, y con la boca muy suelta. Y claro, cuando consiguió su nuevo trabajo, tuvo que ponerlo en Facebook. Era un trabajo de una guardería, y lo que publicó fue algo así como: “Empiezo mi nuevo trabajo, pero realmente odio trabajar cuidando a personas”. Luego añadió además: “Odio estar rodeada de niños”.

Esto fue compartido y llegó hasta alguien relacionado con la guardería, que no dudó en despedirla. Luego ella lloró, y dijo que se arrepentía, que “fue un gran error”, y que no volvería a publicar algo así nunca más”. Bueno, por esto, hay que mantener la boca cerrada.

Dejarte en evidencia

Hay grupos en Facebook que pueden ser del todo inútiles. Por ejemplo, “Alcohólicos Anónimos”. Esto es lo que le pasó a Dan, que tal vez era un alcohólico en rehabilitación, y pensó que necesitaría un grupo de apoyo. Claro que cuando tú te unes a un grupo de Facebook, se lo notifican a tus amigos, por si acaso también quieren unirse.

Claro, en ese caso, pues dejas de ser anónimo. Y luego se preguntará, por qué le miran raro… Pues porque ya saben tu más oscuro secreto. No te preocupes, Dan, el alcoholismo puede curarse. La estupidez, no.

Y por eso es complicado

Seguro que te lo han dicho muchas veces: es mejor estar callado y parecer imbécil, que abrir la boca y demostrar, efectivamente, que lo eres. Pues a esta tal Connie le pasó, cuando su novio cambió el estado de “En una relación” a “Es complicado”. La chica monta todo un lío, cuando lo leyó. Y lo malo es que lo hace públicamente.

Es verdad que ese estado de Facebook hace más daño que otra cosa, pero solo así vas demostrando por qué es complicado estar contigo. Vamos, el resto de amigos ya se han dado cuenta de por qué es complicado.

Otro despido

Hay despidos que se justifican por sí mismos. Y es el caso de Jorge Daniel Dávila, un chef peruano, que fue despedido por insultar la cultura boliviana. Sí, vamos, un poco como lo de Donald Trump, pero a nivel de cocina. El tipo fue despedido por comentarios que hacían referencia al colonialismo: “ustedes eran nuestra provincia”, decía a los bolivianos.

Trabajaba, para colmo, en un restaurante de La Paz, que se desvinculó de las opiniones vertidas por Daniel Dávila, y lanzó un comunicado oficial, para que no les vincularan con esas opiniones racistas vertidas por el cocinero. Lo que hay que ver. Porque para eso, se mantiene la boca cerrada, y el trabajo.

Una más

A mucha gente no le gusta su trabajo, pero es el pan de cada día, y lo que te da de comer. Así que hay que tener cuidado con lo que publicas en Facebook, porque luego puedes arrepentirte. Es lo que le ocurrió a Lindsay, que dijo que su jefe era un pervertido por mirarla constantemente, y que le manda trabajos aburridos, para molestar.

Lo que no tuvo en cuenta, es que tenía a su jefe agregado. Sí, así de idiota es la gente. Entonces el jefe le contesta que no es que sea un pervertido y que no le mira a ella, porque es gay, que vigila para que no arruine esos trabajos aburridos, porque lo arruina hasta lo más simple. Y que como estaba de pruebas, que no se moleste en volver.

Cuando das excusas

Se pilla antes a un mentiroso que aun cojo, y más si tiene Facebook. Por eso, si das alguna excusa a tus compañeros de trabajo, luego no publiques fotos, ni cambies de estado, porque te pillarán. Igual que a esta chica, que dijo en el trabajo que tenía gastroenteritis, y que por eso no podía ir a trabajar hoy.

Lo que no tuvo en cuenta es que la chica (o chico), que curraba con ella, también estaba agregada en su Facebook, y lo vio. Y es cuanto menos, molesto, porque a cualquier persona le molesta que le tomen el pelo de esta manera. Es una pillada en toda regla, y ya podía haberle merecido la pena, porque vamos, igual al día siguiente ya no tiene trabajo.

Peligros de tener a tu madre en Facebook

Sí, cuando eres adolescente haces locuras de este tipo, pero tus padres no tenían Facebook ni otra red social para pillarte. Ahora sí. Y ya ves si funciona, porque lo que tú das a entender es lo que realmente es. Ya sabes, “piensa mal y acertarás”. Bueno, pues si dices que no has salido en todo el fin de semana de la habitación de Carlos, pues eso mismo.

La madre ha hecho lo de toda madre, decir “hablamos cuando vuelvas”. Eso nos hace temblar, y seguro que a la vuelta le esperaba un rapapolvo que la mandaba de vuelta a la habitación de Carlos.

Cuando vas borracha

Usar Facebook o cualquier otra red social mientras estás borracho, no es buena idea, da igual el punto de vista desde el cual tengas que tocarlo. Puedes mandar a alguien un mensaje equivocado, y lo más seguro es que te arrepientas de ello. Por eso, deberían prohibirnos su uso si no estamos en nuestros cabales, o en plenas condiciones.

Liz no arruinó su vida, porque lo que publicó no era demasiado importante. Solo esos pensamientos que te asaltan mientras la borrachera te dura de vuelta a casa: que está perraca perdida y que quiere acostarse con el primero que pille. Y eso, amigos, es publicar sin filtro.

Fuera de sus cabales

Hay gente que está mal de la cabeza. Directamente. Este tipo, después fue detenido, porque en su Facebook publicó una foto de su bebé, para venderlo. Se puede leer bien que es porque su novia le dejó. Entonces lo vende, como si fuera un videojuego o algo así. Vamos, solo le faltaba decir “poco usado” o “como nuevo”. El precio, pues una camioneta.

Y encima le pone un mensaje a su novia que es para demostrar de lo que es capaz. En ese punto piensas que es un broma, hasta que abajo lees: “solo ofertas serias”. Este tipo de personajes da mucho miedo. Pero mucho. Y por eso, les detienen.