El exceso de peso puede desencadenar graves problemas a la salud como enfermedades cardíacas, diabetes tipo 2, varios tipos de cáncer e incluso depresión.

Según explica a la revista femenina Cosmopolitan el médico estadounidense y autor de varios libros sobre el tema, Myo Nwe, el exceso de grasa corporal puede causar inflamación en nuestros órganos, lo que con el tiempo puede acarrear una serie de efectos secundarios, incluyendo los mencionados.

Sin embargo, determinar de manera perfecta el peso más saludable no es sencillo. Por ejemplo, se estima que entre un 25 y 31% de grasa corporal es normal en las mujeres, y en los hombres, entre un 21 y 25%. Pero hay personas que tienen más o menos que estas cifras y aún así son clínicamente sanos, es decir, no tienen enfermedades ni factores de riesgo.

Algo similar ocurre con el Índice de Masa Corporal (IMC) que mide la relación entre el peso y la estatura. Se considera que un IMC normal está entre 18.5 y 24.9, pero hay personas que tienen un IMC elevado porque tienen mayor masa muscular. Lo que ocurre es que este indicador no considera otros factores como composición corporal, antecedentes familiares, análisis de sangre y estilo de vida, por lo tanto, es relativo.

Aún así, el IMC sirve para empezar evaluar a una persona con evidentes problemas de peso, dice la doctora Nadia Pietrzykowska, especialista en medicina de obesidad y miembro del comité de educación de la Coalición Contra la Obesidad en Estados Unidos.

Por ello, si tu IMC supera el 24.9 y tienes algunos de los siguientes síntomas, deberías considerar consultar a un especialista para iniciar un tratamiento para bajar de peso.

1. Sientes incomodidad al hacer ejercicio.

La actividad física es fundamental para llevar una vida sana. Si sientes que te cuesta hacer ejercicio o que tu peso te detiene, es necesario que bajes algunos kilos y así no sólo puedas cumplir tus objetivos fitness, sino también disfrutar del entrenamiento.

2. Roncas mucho

Si tu pareja o cercanos se quejan de tus ronquidos es posible que sea consecuencia del sobrepeso. Y es que cuando el cuerpo almacena grasa alrededor del cuello, se pueden estrechar las vías respiratorias causando una respiración superficial o pausas en la respiración, a esto se le llama apnea del sueño.

3. Tienes puntos muy sensibles en tu cuerpo

El sobrepeso puede generar inflamación en todo la anatomía, haciendo que el tejido graso bajo la piel sea más sensible al tacto, sintiéndose como si tuvieras moretones permanentes. El doctor Nwe señala que si tienes un IMC alto y sientes dolor en lugares al azar repartidos por tu cuerpo, perder peso podría ayudarte.

4. Sientes cansancio todo el tiempo

La inflamación interna causada por el exceso de grasa puede llevarte a un estado de fatiga constante, asegura Nwe. Si tu IMC es elevado y las tareas rutinarias como ir al supermercado te agotan extremadamente, tus kilos de más podría ser los culpables.

5. Comes un montón, pero siempre tienes hambre

Esto es una señal de que estás ingiriendo los alimentos equivocados (como dulces o grasas trans), que carecen de fibra, proteínas o grasas saludables, que son los que dan la sensación de saciedad.

Pero también podría ser un síntoma sútil de resistencia a la insulina o diabetes tipo 2. Otros síntomas son visión borrosa, hormigueo o entumecimiento en manos y pies, además de sed extrema, de acuerdo con la Asociación estadounidense de la Diabetes.

Lo bueno es que si bien el exceso de peso puede desencadenar estas condiciones, la pérdida de peso puede revertirlas.

6. Tienes presión arterial alta o colesterol alto.

El doctor Nwe dice la pérdida de peso puede reducir estas cifras sin necesidad de medicamentos en algunos casos, lo que es más seguro, barato y más sostenible que tomar píldoras de por vida.

7. Tu cintura mide más de 88,9 centímetros

El exceso de grasa alrededor del vientre puede aumentar el riesgo de enfermedades cardíacas, diabetes tipo 2, colesterol alto y presión arterial alta, de acuerdo con los Centros para el Control de Enfermedades de Estados Unidos.

Nwe afirma que si tu IMC es alto y la circunferencia de tu cintura supera los 88,9 centímetros, debes visitar a un médico para solicitar un tratamiento para bajar de peso.

8. Un familiar cercano murió de cáncer

El exceso de grasa puede producir un aumento elevado de estrógenos, que se relacionan con el cáncer de mama y otros tipos de hormonas que promueven el crecimiento de tumores, según el Instituto estadounidense del Cáncer.

Tener historial familiar de cáncer aumenta el riesgo de estas patologías y si bien no es lo único que puedes hacer, mantener un peso saludable reduce el riesgo.

9. Te duelen las rodillas, las caderas y la espalda

El sobrepeso puede ejercer presión adicional en las articulaciones, lo que desgasta el tejido a su alrededor y hace que el movimiento sea más incómodo.

10. Tu peso ha aumentado mucho con los años

Aunque es normal aumentar de peso con el paso de los años, si notas que ha sido mucho, es bueno cambiar algunos hábitos para lograr un equilibrio y una vida más saludable. Un reajuste en la dieta y el ejercicio constante, pueden restarte algunos kilos, y ayudarte no sólo recuperar la salud, sino también la confianza en ti.