Mantener unos niveles adecuados de estrés no solo no es negativo, sino que podría ayudarte a vivir más. Sin embargo, si no sabemos gestionarlo y vivimos permanentemente agobiados por él, nuestro cuerpo podría experimentar consecuencias devastoradas. Descubre los 6 principales síntomas del estrés crónico y cómo afecta a tu organismo.
1. Mala memoria
Según Robert M. Sapolsky, investigador de Stanford, el exceso de estrés dispara la producción de glucocorticiodes en nuestro cerebro, afectando al almacenamiento de la memoria en el hipocampo. Esto se traduce en todo tipo de olvidos y despistes.
Es más, se ha demostrado que las hormonas asociadas al estrés tienen la capacidad de aumentar la memoria de eventos traumáticos, ya que estos pueden ser claves para la supervivencia del sujeto. Las pequeñas cosas en cambio, quedan totalmente ignoradas.
2. Dolores de cabeza
La mayoría de los dolores de cabeza experimentados por adultos son provocados por culpa del estrés y la excesiva tensión que este provoca en los músculos de hombros, cuello y cuero cabelludo.
Esta rigidez provoca la contracción de los vasos sanguíneos, reduciendo el flujo de sangre hacia el cerebro y provocando el consabido dolor de cabeza, y otro problemas asociados como dificultad para dormir, irritabilidad y sensibilidad a la luz / ruido.
3. Problemas digestivos
El doctor Kenneth Koch nos explica las consecuencias del estrés para nuestro sistema digestivo.
“El estrés puede causar espasmos esofagales y excesiva secreción de ácidos estomacales, lo que se traduciría en ardor y reflujo. Puede hacer que nuestro estómago se cierre o sintamos nauseas, vómitos en los casos más extremos. El colon también se resiente y puede reaccionar provocando diarrea o estreñimiento”.
4. Cambios de peso inexplicables
El estrés puede hacernos aumentar o disminuir de peso de forma rápida e inexplicable según nuestros hábitos y metabolismo. Las hormonas del estrés -cortisol y adrenalina, entre otras- afectan al apetito y a la ansiedad, lo que puede hacernos comer más o cerrar nuestro estómago totalmente.
Las personas estresadas pueden enfermar más fácilmente, debido a que el estrés produce altos niveles de citoquinas, un compuesto inflamatorio que afecta al sistema inmunológico.
Este compuesto, presente en la mayoría de enfermedades autoinmunes, afecta a la forma en que los glóbulos blancos se comunican y coordinan, lo que provoca una peor respuesta ante virus y bacterias.
5. Pérdida del cabello
Normalmente el cabello nace, crece y cae de forma natural para volver a crecer, pero el estrés rompe este ciclo, acortando la fase de crecimiento y provocando la caída masiva del cabello.
Esto depende de nuevo de las hormonas del estrés y puede afectar de diversa forma seamos hombres o mujeres. La calvicie por estrés puede afectar a todo el cabello o solo a algunas zonas, provocando pequeñas calvas por todo el cuero cabelludo.
Debes saber que la caída no es inmediata, sino que suele producirse unos 3 meses después de haber padecido estrés, por lo que la próxima vez que comiences a perder mucho pelo, pregúntate que ocurría hace un trimestre.
6. Problemas cutáneos
El estrés crónico también afectará a nuestra piel, debilitándola y haciéndola más sensible a las agresiones externas, lo que aumentará las probabilidades de sufrir eczema, rojeces y psoriasis.
Si crees padecer estrés crónico o ansiedad debes hacer algo. Ponte en manos de un especialista, realiza un actividad relajante o trata de poner en practica esta lista de 101 medidas antiestres.